Las obras de la segunda fase de rehabilitación de la antigua iglesia de Sant Francesc de Valls ya han comenzado. Desde hace un par de semanas, los técnicos trabajan en la reconstrucción de las bóvedas y las cornizas, la reparación del campanario y la apertura de una salida de emergencia, entre otras, para que el equipamiento cumpla con las condiciones de seguridad y accesibilidad idóneas para acoger actividades.
Desde el consistorio calculan que los trabajos finalizarán en primavera. La voluntad es que el edificio -declarado Bien Cultural de Interés Local- se convierta en un centro de arte contemporáneo y auditorio musical, después de haber estado 50 años clausurado. La inversión total del proyecto ha sido de 640.000 euros -174.000 euros en la segunda fase-.
