Esta tarde se ha inaugurado la primera parte del proyecto Porta Tàrraco. Es un nuevo espacio interactivo situado dentro de la Volta del Pallol, cerrada desde 2011, y que será la nueva puerta de entrada del visitante a la antigua Tàrraco. Se trata de un videomapping ubicado dentro de la bóveda y acompañado de la gran maqueta romana, que vuelve a su lugar original. Los trabajos han sido llevados a cabo, por un lado, por la empresa Vadexpo como autores del guionaje, documentación y trabajos previos, y por otro lado, por la empresa Wasabi Produccions, quien ganó el concurso de software y hardware para el montaje final.
El proyecto recupera la maqueta de Tàrraco que en los últimos años se ha podido ver en la Antigua Audiencia -pero inicialmente fue creada para exhibirse en la Volta- acompañada de las nuevas tecnologías con la técnica del videomapping (o vídeo mapping), es decir, una proyección pensada para superficies en volumen, como fachadas o mobiliario urbano y que tiene como objetivo poner en contexto histórico al visitante antes de empezar la visita a la ciudad. Esta instalación se ha podido llevar a cabo después de la restauración de la bóveda, incluida dentro del proyecto de rehabilitación estructural de Ca l’Agapito.
En este caso se utilizan los muros de la antigua bóveda romana para proyectar imágenes de grandes dimensiones que buscan generar una experiencia inmersiva, al mismo tiempo que la maqueta sirve como punto de conexión físico para la interpretación de la configuración urbana de la ciudad. Todo esto se hace mediante una proyección audiovisual sorprendente, que utiliza como pretexto la maqueta y donde podemos ver desde carreras de cuadrigas, cómo era el antiguo puerto romano o la vida en el campo en época romana. La narración es conducida por la joven esclava Melpomene, que murió con 18 años en Tàrraco, pero que conocemos gracias a los estudios de una inscripción funeraria familiar encontrada en la entrada de Tarragona, en la Via Augusta.
En la presentación, el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, ha querido destacar “la importancia del proyecto Porta Tàrraco que hemos llevado a cabo en este mandato y que conlleva una mejora sustancial de la recepción de nuestros visitantes, tanto de los turistas como de los escolares y también los propios tarraconenses y tarraconenses”. Asimismo, ha agradecido “el esfuerzo llevado a cabo tanto por el equipo de la consejería de Patrimonio, como del trabajo transversal dentro del Ayuntamiento con el Patronato Municipal Turismo, pero también con otras administraciones, como la Generalitat o el gobierno del Estado que han contribuido a que este proyecto se pudiera materializar”.
Por su parte, el consejero Hermán Pinedo, al frente de Patrimonio, ha puesto de manifiesto que “el videomapping que se presenta hoy supone una nueva forma de explicar nuestra historia y el pasado de Tàrraco” y ha añadido que “se trata de generar un contenido muy atractivo y cercano al visitante, desde un nuevo enfoque que hasta ahora no habíamos visto en la ciudad y que como Patrimonio Mundial que somos, nos merecemos”.
“Una de las voluntades de este Ayuntamiento ha sido poner a disposición de la ciudadanía y los visitantes, este espacio que hoy inauguramos, y sobre el que seguimos trabajando y seguiremos trabajando con el objetivo de dar a conocer nuestra historia, preservarla y hacerla conocedora a las futuras generaciones”, ha concluido el alcalde.
La visita
A partir de ahora y hasta la finalización de las obras del edificio de Ca l’Agapito, el videomapping se podrá ver sólo los fines de semana, incluyendo viernes por la tarde. Este fin de semana, sin embargo, mañana y domingo, se harán pases reservados a entidades e instituciones, así como agentes del sector. El fin de semana que viene será de puertas abiertas, es decir, los días 31 de marzo, 1 y 2 de abril se harán pases gratuitos para el público general, con reserva previa y en catalán y castellano. Y a partir de entonces, permanecerá abierta sólo los fines de semana, hasta que finalice la obra de Ca l’Agapito, con compra de entrada a 5€ (los niños hasta 11 años, tendrán entrada gratuita).
Tanto las entradas con reserva previa del fin de semana que viene, como los pases del mes de mayo, se podrán adquirir en la web que se habilitará en los próximos días.
El vídeo tiene una duración de unos 13 minutos y se podrá ver en cuatro idiomas: catalán, castellano, inglés o francés. El aforo máximo es de 30 personas, que estarán dentro de la bóveda mientras dure el vídeo y seguidamente podrán acercarse a ver la maqueta.
Porta Tàrraco
El proyecto Porta Tàrraco surge de la necesidad de mejorar la conservación y difusión de los elementos patrimoniales de Tàrraco, incluidos mayoritariamente en la Declaración de Tàrraco Patrimonio Mundial de la Humanidad, y así como para un mejor conocimiento y estima de los tarraconenses y tarraconenses y de las personas que nos visitan.
Este proyecto se ha llevado a cabo desde el principio con la colaboración entre las Consejerías de Turismo y Patrimonio del Ayuntamiento, así como también con las diferentes administraciones. Por un lado, el proyecto de rehabilitación de la bóveda y fachada del Antiguo Beateri (Ca l’Agapito) ha contado con una aportación del Ministerio de Fomento a través del 1,5% cultural, y por otro lado, las acciones divulgativas del Porta Tàrraco, a través de la colaboración con el Departamento de Turismo de la Generalitat de Catalunya.
Antigua Audiencia
En la Torre romana de la Antigua Audiencia se han trasladado otras maquetas para favorecer la comprensión de la ciudad romana y su difusión y se está trabajando en llevar a cabo la oficina de Turismo, compartida entre del Departamento de Turismo de la Generalitat y el Patronato municipal de Turismo.
La Volta del Pallol
La Volta del Pallol formaba parte de las construcciones del lado occidental de la gran plaza de administración del Foro Provincial de Tàrraco. La bóveda debía ser, en época romana, una larga galería que circulaba por detrás del pórtico y que servía de soporte a un segundo piso. Sin embargo, desconocemos la funcionalidad final en esta época y cuál fue su uso hasta el siglo XVI.
El actual nombre de la plaza viene dado por el hecho de que durante la segunda mitad del siglo XVI se instaló el pallol o tienda del trigo y el peso de la harina. El pallol era el gran depósito municipal del grano y ejercía las funciones de casa pública para comprarlo y venderlo. De esta forma, la bóveda se convirtió en almacén en diferentes etapas de la historia, así como también de iglesia.