Los 275 niños de Constantí que han dispuesto de tarjetas monedero durante la situación de estado de alarma a causa del coronavirus, mantendrán esta ayuda durante los meses de verano con el fin de garantizar al menos una comida completa al día.
A raíz del decreto del estado de alarma el mes de marzo, el Gobierno de la Generalitat decidió mantener las becas comedor durante la crisis. Mientras los alumnos no han podido ir a la escuela, el dinero equivalente a estas becas se ha hecho llegar a las familias a través de tarjetas monedero con las que podían comprar los alimentos. En Constantí, se distribuyeron hasta 275 tarjetas que se han ido recargando con el dinero correspondiente a cada menor, cada vez que se ha ido ampliando el estado de alarma.
El Ayuntamiento de Constantí y el Consejo Comarcal del Tarragonès han coordinado esta acción, que beneficia a todos aquellos niños y familias que durante el curso escolar son beneficiarias de las becas comedor. Ahora que el estado de alarma ha finalizado, la situación de crisis de muchas familias continúa y el riesgo de exclusión social y pobreza afecta a los menores más desfavorecidos.
El Ayuntamiento de Constantí sigue planteando como una de las actuaciones prioritarias la detección y la garantía de la cobertura de las necesidades de alimentación de los niños, y durante los últimos años ha mantenido el servicio de comedor escolar en todos los períodos de vacaciones escolares.
