El pasado mes de mayo se cumplió el primer año de mandato tras las elecciones de mayo de 2019. ¿Qué valoración hace de este primer año al frente del consistorio? Este primer año está claramente marcado por tres hechos muy destacados: por un lado, la celebración de las fiestas Decenales de la Virgen del Lledó. Por otro lado, la implantación del nuevo servicio de recogida de basuras, que por primera vez en La Pobla incorpora la recogida de la fracción orgánica. Y en tercer lugar y desgraciadamente, la llegada del Covid-19 y las terribles consecuencias que esta pandemia ha provocado.
Aparte de esto, hemos podido inaugurar la nueva Carpa permanente de los jardines del Pabellón y seguimos trabajando para mejorar La Pobla día a día, sobre todo desde el ámbito de las políticas sociales.
En la última entrevista con este diario comentó que venía con las energías renovadas. Preparados para ofrecer, en esta legislatura, nuevas ideas y nuevas formas de hacer. ¿En qué lo ha podido plasmar? El contexto inesperado y tan negativo que nos ha tocado vivir a todos ha frenado parcialmente este empuje con el que llegábamos de nuevo al salón de plenos, si bien a pesar de todos los impedimentos hemos seguido trabajando en el futuro de La Pobla y de sus habitantes. En esta legislatura, tenemos concejales nuevos que destacan por su juventud y por su trayectoria académica y profesional. Este es un valor que queremos aprovechar para ponerlo al servicio del municipio y de las necesidades de los pobletanos. En este sentido y por ejemplo, hemos dado un nuevo impulso al programa de cursos municipales, adaptándolos a las nuevas tecnologías y potenciando los cursos online. También hemos incrementado el peso específico de la sede electrónica, como nuevo método de relación con la comunidad. Desgraciadamente, otros proyectos que también tenemos en mente tendrán que esperar a que la recuperación de la normalidad sea realmente efectiva.
Antes de hablar más concretamente de la crisis sanitaria de la Covid – 19, me gustaría que nos explicara en qué punto se encuentra la celebración de las Decenales de la Virgen del Lledó. La idea principal era celebrarlo durante todo el año, ¿verdad? Teniendo en cuenta la situación, ¿cómo lo estáis resolviendo? Desgraciadamente, la crisis sanitaria nos ha obligado a suspender todos y cada uno de los actos culturales, lúdicos y sociales que teníamos previstos para este año, estuvieran o no vinculados a las fiestas Decenales. Teniendo en cuenta este contexto y la previsión a medio plazo, hemos seguido optando -como hemos hecho durante toda esta crisis- por la prudencia y la sensatez y, en consecuencia, hemos dado por finalizadas las Decenales de la Virgen del Lledó. Esta es una decisión tomada a regañadientes, pero con la cabeza y priorizando la salud de las personas.
Hablemos, ahora sí, de la crisis del Coronavirus. ¿Cómo se ha vivido la pandemia en La Pobla de Mafumet? A nivel de infecciones, el impacto ha sido bajo. Hemos tenido alguna persona contagiada, numéricamente pocas y, lo que es más importante, con una sintomatología leve. Por suerte, no hemos tenido que lamentar ninguna pérdida humana en el municipio.
Con todo, el impacto sí que se ha notado en otras esferas: a nivel económico, lógicamente, quien más quien menos ha sufrido las consecuencias del confinamiento, especialmente en lo que se refiere a los puestos de trabajo con la aplicación de expedientes de regulación de empleo, etc. En cuanto al Ayuntamiento, afortunadamente no hemos tenido que aplicar ninguna medida con afectación directa a las economías familiares de nuestros empleados. Gracias a la gestión rigurosa y cuidadosa que venimos aplicando desde hace muchos años, la tesorería municipal ha resistido esta difícil etapa y, además, hemos podido destinar recursos económicos a lo que era más necesario: ayudar a las personas.
Teniendo en cuenta que ha sido una situación que ha sobrevenido a todo el mundo, ¿cómo se ha gestionado esta crisis sanitaria en la villa? Desde el Ayuntamiento hemos trabajado intensamente para hacer todo lo posible en el ámbito de las políticas sociales. El objetivo es que nadie quede atrás como consecuencia de los daños colaterales del coronavirus. Por eso, hemos destinado todos los recursos materiales y humanos posibles a potenciar la asistencia social, a través del cuerpo de Vigilados Municipales, la Brigada municipal y los voluntarios de Protección Civil. Además, hemos aprobado el Plan de choque económico contra los efectos económicos y sociales de la Covid-19, y también hemos impulsado y organizado diversas medidas sociales para ayudar a las personas más necesitadas y los grupos de riesgo.
En un acto de homenaje a las víctimas del coronavirus usted lamentó las muertes que se han producido y en cómo se han producido. Mucha gente, por la peligrosidad de contagio, ha muerto, desgraciadamente, sola y sin el calor de su gente. ¿Por dónde cree que pasa la solución para evitar que este panorama se repita (desde su posición como alcalde)? De entrada, en La Pobla podemos estar más que contentos porque no hemos tenido que lamentar ninguna pérdida humana. Pero desgraciadamente, a nivel global es prácticamente imposible evitar que una situación como la actual se vuelva a repetir, porque estamos hablando de un problema global y ya hemos visto lo difícil que es detener la propagación de un virus. Por lo tanto, yo diría que hay que poner la atención, los recursos y los esfuerzos en prepararnos mejor para la respuesta. Es decir, tenemos que dotar más y mejor a los profesionales sanitarios, para que puedan hacer su trabajo en unas buenas condiciones. Y, como sociedad, tenemos que tomar conciencia colectiva y ser rigurosos en la aplicación de las medidas y recomendaciones que hagan las autoridades y los expertos.
¿Qué ha sido lo más complicado de toda esta gestión? Yo diría que lo más complicado de todo ha sido la deshumanización a la que nos hemos visto abocados. Todo el mundo, no sólo el Ayuntamiento de La Pobla de Mafumet, se ha visto obligado a suspender el trato personal que, en el caso de un municipio pequeño como es el nuestro, resulta fundamental. Esta interrupción de las interacciones humanas ha sido, para mí, el principal problema en términos de gestión, porque no dejas de pensar que durante el confinamiento había mucha gente que vive sola y que, desgraciadamente, no tenían posibilidades de hablar con otras personas, de expresar sus inquietudes, etc.
A la vez, el esfuerzo hecho por parte de nuestros vigilantes municipales, voluntarios de Protección Civil y Brigada municipal, con el fin de mantener los lazos humanos en la medida en que ha sido posible, es la mayor satisfacción que guardo de este difícil período. Ellos, junto con los empleados de los comercios y los colectivos y particulares que, de manera voluntaria, han aportado su grano de arena para ayudar a los sanitarios, son un gran motivo de orgullo para La Pobla de Mafumet.
¿Cree que podemos sacar algo positivo de esta situación? Como decía Nietzsche, "Lo que no te mata, te hace más fuerte". Hemos aprendido a la fuerza y sobre la marcha, sobre cuestiones tan fundamentales como la atención social urgente, la protección de la salud propia y ajena, etc. Todo ello nos ha servido para establecer protocolos que, en el futuro, nos permitirán reaccionar mejor y más rápidamente ante hipotéticas situaciones de crisis. Por otra parte, creo que también hemos aprendido a valorar aspectos de la vida que quizás antes dábamos por hechos y a los que no dábamos tanta importancia, como por ejemplo poder salir a la calle, abrazar y besar a las personas queridas, etc.
¿Cuáles son las medidas económicas que se han puesto en marcha (o se pondrán) desde el consistorio para paliar los efectos de esta crisis sanitaria? En tiempos de dificultad es cuando las administraciones deben hacerse más presentes, más cercanas a la sociedad a la que sirven. Con este objetivo, y con la voluntad clara de ayudar a los pobletanos a tener las mejores condiciones de vida posibles, el Ayuntamiento ha activado un Plan de choque económico contra las consecuencias económicas y sociales provocadas por la expansión de la pandemia Covid-19. Se trata de medidas pensadas para propiciar la reactivación económica, y destinadas directamente a los trabajadores y trabajadoras de La Pobla y, también, al conjunto de la sociedad.
Por eso, hemos habilitado una línea de ayudas destinadas a los trabajadores, autónomos y empresas, con ayudas directas al emprendimiento y a la contratación de personas empadronadas en el municipio y en situación de desempleo, así como también ayudas para gastos derivados de la pandemia y la creación de un Plan de Empleo Local, que incluye la creación de puestos de trabajo en la Brigada municipal.
¿Cuáles son las cifras de este Plan de ayudas económicas? El consistorio ofrece cuatro tipos de medidas destinadas a trabajadores, autónomos y empresas. La primera de ellas se concreta en una ayuda de hasta 6.000 euros para la creación de nuevas empresas o de nuevos emprendedores, con el requisito de mantener la actividad durante un mínimo de un año. Esta acción pretende relanzar la actividad económica del municipio, así como ofrecer una salida profesional a los empleados o personas en situación de desempleo que quieran convertirse en emprendedores.
También se ofrece una ayuda de hasta 3.000 euros para compensar los gastos derivados de la Covid-19. Para acogerse a esta ayuda, hay que acreditar gastos provocados por el cierre o la reducción de la actividad que se realiza, en una medida aplicable a empresas de hasta 10 empleados y a autónomos, censados en La Pobla.
Asimismo, también se activa una ayuda económica directa para la contratación de personas empadronadas en el municipio. En este caso, las ayudas diferencian entre contrataciones de personas menores o mayores de 50 años, con baremos que van desde los 600 euros mensuales -con un máximo de 4.800 euros anuales- en el caso de contratos por un mínimo de 3 meses a jornada completa, hasta los 19.200 euros de ayuda directa en los casos de contratación indefinida a jornada completa de una persona mayor de 50 años.
En este ámbito de ayudas destinadas a la contratación de personas por parte de empresas o autónomos locales o foráneos, será necesario que la persona contratada esté empadronada en La Pobla, que se encuentre en situación de desempleo y que esté inscrita en la bolsa de trabajo del municipio.
Finalmente, el paquete de ayudas económicas destinadas a fomentar el empleo y la reactivación económica en el municipio se ve completado con el Plan de Empleo Local, que prevé la creación de 15 puestos de trabajo temporal en la Brigada municipal. En este caso, la ayuda consiste en una oferta laboral para contratación temporal directa, a la que pueden optar las personas empadronadas en La Pobla de Mafumet, que se encuentren en situación de desempleo y que estén inscritas en la Bolsa de trabajo local.
¿Tienen previstas medidas sociales para las familias más necesitadas? Sí, en el marco del Plan de choque económico contra las consecuencias económicas y sociales provocadas por la expansión de la pandemia Covid-19 se contempla una segunda línea de ayudas, de carácter social, los cuales están dirigidos al conjunto de la sociedad pobletana. Esta línea incluye ayudas de tipo asistencial, así como el aumento de la dotación económica del programa de ayudas a los estudiantes.
¿Cómo ha sido la vuelta al cole en La Pobla de Mafumet? Ha sido una vuelta atípica, al igual que ha sido en todas partes. Los nuevos protocolos de entrada y salida, así como el día a día en la escuela, requieren de un esfuerzo de adaptación por parte de todo el mundo: alumnos, profesores y familias. Por lo tanto, estamos en un período de incertidumbre, porque todas las medidas adoptadas van evolucionando con la pandemia. Desde el Ayuntamiento no podemos hacer gran cosa, porque no tenemos la competencia de enseñanza ni nos corresponde establecer los protocolos. Con todo y como siempre hemos hecho, desde el Ayuntamiento colaboraremos en el correcto desarrollo del curso académico, este año aún con más implicación si cabe, dadas las circunstancias.
En este sentido, hemos colaborado estrechamente con la escuela para crear un protocolo de entradas y salidas al centro educativo, estableciendo hasta cuatro puntos de acceso y diferentes horarios de entrada y salida, en función de cada curso. Asimismo, en la Guardería municipal hemos dividido el espacio en zonas diferenciadas, para que cada grupo tenga un espacio adjudicado. Además, los grupos están saliendo por turnos diferenciados, lo que permite minimizar los contactos y, por lo tanto, el riesgo de contagios.
Por otra parte, ya tenemos en marcha el programa de ayudas a los estudiantes, que como siempre incluye un amplio abanico de ayudas económicas para los alumnos pobletanos de cualquier nivel académico. Para el Ayuntamiento, supone una inversión anual superior a los 300.000 euros. Además, de cara al nuevo curso hemos redoblado los esfuerzos, aumentando la dotación económica de cada una de las ayudas, porque entendemos que la situación general y las economías familiares así lo merecen. El plazo de presentación de solicitudes para estas ayudas ya está abierto, y finalizará el próximo 30 de noviembre.
Usted, como alcalde y máximo responsable del Ayuntamiento, ¿cuál es el mensaje que quiere dar a los convecinos? El mensaje es claro y no puede ser otro que el que hemos aplicado hasta ahora: sensatez, prudencia, unidad y compromiso. Sólo así podremos superar esta difícil situación. Desde la propia conciencia del problema al que nos enfrentamos, desde el compromiso por aplicar todas las medidas necesarias para detener la propagación de la pandemia, pensando en la protección de la salud propia y ajena. Todos juntos, como un solo individuo, debemos actuar en beneficio del colectivo para que nadie quede atrás. Y, como siempre, el Ayuntamiento estará al frente de este proceso.
