La Empresa Municipal de Transportes (EMT) pone en circulación ocho autobuses nuevos con el objetivo de dar continuidad a la renovación de su flota. Cinco de los vehículos tienen una longitud de 12 metros, mientras que los otros tres ocupan 10 metros de longitud. Los ocho están equipados con motor Euro 6D Eco, que disminuye la emisión de partículas.
Entre las novedades que incorporan, destaca el hecho de que prescinden del enmoquetado de los asientos, lo cual repercute en la mejora de las condiciones de limpieza e higiene del interior del autobús. Dispondrán también de mamparas de separación de la zona del conductor y cámaras de vigilancia. Todo ello, está pensado para garantizar la seguridad de las personas usuarias del transporte público.
Asimismo, se incorpora una segunda plataforma manual para personas con movilidad reducida, que se activará en caso de que no funcione la habitual plataforma automática. De este modo, se garantiza también la accesibilidad de todo el mundo al transporte público municipal.
El alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, explica que "la accesibilidad y la seguridad de los usuarios son una prioridad. El servicio de transporte público de Tarragona es esencial para la movilidad sostenible de la ciudad. Y este servicio se tiene que dar, ahora más que nunca, con garantías de seguridad y de acceso de toda la ciudadanía". La renovación de la flota con los ocho vehículos nuevos ha supuesto una inversión de un millón seiscientos mil euros.
Tanto el alcalde Ricomà como el presidente de la EMT, Jordi Fortuny, han querido agradecer a todos los trabajadores y trabajadoras de la empresa de autobuses municipales "su gran tarea desarrollada estos días de confinamiento".