La comunidad de Ghana que vive en Tarragona hizo ayer una aportación económica de 1.000 euros al Hospital Joan XXIII para proveerse de guantes, mascarillas y otro material sanitario. De esta manera quieren contribuir a la lucha contra el coronavirus. Esta donación forma parte de un programa que tiene en marcha la consejería de Nueva Ciudadanía que consiste en el hecho de que los diferentes colectivos de inmigrantes de Tarragona colaboren con la ciudad que los ha acogido. El presidente de la Comunidad Ghanesa de Tarragona, Augustine Diawo, asegura que no se pueden quedar de brazos cruzados ante una situación de emergencia.
"Consideramos que pequeñas gotas hacen un océano". El director de enfermería del Hospital Joan XXIII, Jesús Esteve, agradece el gesto de la comunidad ghanesa teniendo en cuenta que no viven en la abundancia.
"Es una forma de agradecer a nuestra ciudad todo aquello que les ha dado como ciudad acogedora. Independientemente del origen de las personas pueden aportar mucho a la sociedad tarraconense", explica la consejera de Nueva Ciudadanía, Paula Varas. Y añade: "Lo realmente significativo de este proyecto es ver cómo la nueva ciudadanía de Tarragona dejan de verse como personas que perciben ayudas para convertirse en tarraconenses que también aportan su propio trabajo en beneficio común o poniendo dinero de su bolsillo para ayudar a los demás. Iniciativas como las que han hecho desde la comunidad ghanesa de Torreforta demuestran que ellos también quieren colaborar en lo que haga falta para ayudar a la ciudad".
A través de la consejería de Nueva Ciudadanía se han coordinado otras aportaciones.
Diferentes colectivos chinos como la Iglesia Católica China aportó 600 mascarillas. Asociaciones de marroquíes han dado alimentos para familias necesitadas de la ciudad como también lo ha hecho la Coordinadora Latina de Tarragona.