Con motivo de la rueda de prensa que ha presentado esta mañana el alcalde de Tarragona para presentar el nuevo equipo de gobierno, que incorpora a CUP y Junts, el portavoz del Grupo Municipal del Partido Popular ha manifestado: "Después de dos años de un gobierno débil e incapaz de gestionar la ciudad, Tarragona no sólo ha perdido toda oportunidad de liderazgo y progreso. Los tarraconenses nos hemos visto obligados a renunciar a la recuperación económica y a los proyectos de ciudad para pasar a preocuparnos de que no nos atraquen en la calle, de huir de las peleas a golpes de machete y de que no nos ocupen nuestra vivienda. La fórmula que ha escogido el Sr. Ricomà ante esta situación es dejar Tarragona en manos de la CUP, que asumirá, entre otras, las carteras de Vivienda y de Cultura. Nunca nuestra ciudad -antes moderada, tranquila y segura-, se había visto abocada a una situación tan grave. De hecho, es una contradicción que la CUP tenga funciones de gobierno porque es una formación política antisistema contraria al ordenamiento constitucional. Tarragona ahora será conocida como la única capital gobernada por la CUP". Y ha añadido: "No deja de ser curioso que el alcalde-consejero de Cultura que presumía de hacer de la Cultura su eje de acción política haya pasado esta competencia a la CUP tan pronto como ha podido".
En relación a la incorporación de Junts per Tarragona, el consejero Martín ha afirmado que "es absolutamente esperpéntico el espectáculo que han estado dando durante meses en torno a un pacto que sufre grietas tan grandes como la postura manifiestamente opuesta en relación al planeamiento urbanístico de la ciudad. Que Junts haya bajado la cabeza en temas capitales como el POUM evidencia que se trata de un pacto que 'suma' -como ha dicho el Sr. Ricomà-, pero para el beneficio de los propios consejeros del actual equipo de gobierno, y 'resta' dos años más a Tarragona y a los tarraconenses. El descontrol y la decadencia a la que están sometiendo a la ciudad en un pacto sólo ungido por la confluencia de fuerzas soberanistas puede ser irreversible", ha concluido.
