Estudiantes de enfermería de la URV colaboran en la vacunación masiva

02 de agosto de 2021 a las 10:50h

La pandemia ha llevado a los estudiantes de los diferentes grados de ciencias de la salud de la URV a colaborar con el Departamento de Salud con su fuerza de trabajo. Ya lo hicieron las primeras semanas y meses del estado de alarma, cuando supusieron un refuerzo para los centros asistenciales, y han vuelto a hacerlo durante el período de vacunación contra la covid-19.

Una treintena de estudiantes de Enfermería, que este curso y el próximo llegarán al final de la carrera universitaria, trabajan en los puntos de vacunación masiva de Tortosa y Tarragona, además de apoyar en otros centros y también en empresas. Se encargan de preparar y administrar las dosis de la vacuna y de controlar la sala de reposo donde deben esperarse las personas ya vacunadas en caso de que tengan una reacción adversa durante los primeros minutos. 26 estudiantes más de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud y de primero de la Facultad de Enfermería han estado realizando tareas de voluntarios en el Pabellón de Deportes de Tarragona.

Los estudiantes de Enfermería se apuntaron como voluntarios cuando el Departamento de Salud hizo un llamamiento en enero para preparar la vacunación masiva. Unos meses más tarde, los que cursaban tercero y cuarto se incorporaban para realizar esta tarea pero con un contrato de auxiliar sanitario, como el que ya tuvieron durante los primeros meses de pandemia los estudiantes que trabajaron en los centros asistenciales.

"Empezamos con la ayuda de una enfermera que nos explicó cómo funcionaba el programa y el protocolo de la vacunación y al cabo de una semana nos pusieron por parejas de estudiantes: uno registraba en el ordenador al paciente que iba a vacunarse y el otro preparaba la dosis de la vacuna correspondiente y la administraba al paciente", explica Candela Honrubia, estudiante de Enfermería, que estuvo en el Pabellón Municipal de Deportes de Tortosa. Pasado el tiempo, los estudiantes ya hacen directamente la preparación y administración de dosis porque un auxiliar administrativo se encarga de las tareas de registro, explica Alexandra Morari, también estudiante que estará hasta septiembre en el mismo punto.

Explican que "es un trabajo gratificante porque en el panorama actual la vacuna otorga esperanza a la población, y nosotros estamos contribuyendo -dice Honrubia-. La gente, mayoritariamente, viene muy ilusionada a vacunarse y eso te llena". Morari es de una opinión similar: "Acepté el trabajo con mucha ilusión y cada día aprendemos cosas nuevas". Añade que se trata de una "experiencia positiva pero mejorable en cuanto a las condiciones". Es al fin y al cabo un aprendizaje con el que cuentan con personal sanitario titulado, que las guía en aquello que necesitan: "Nos han hecho sentir una más del equipo y nos han dado su confianza".

Los de Enfermería, una treintena en total, no han sido los únicos estudiantes que han colaborado con la campaña de vacunación contra la covid-19 en el Pabellón de Deportes de Tortosa y en el Palacio Municipal de Deportes de Tarragona. Como ya hicieron en la primera ola de la pandemia, los estudiantes de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud con el apoyo del centro crearon una bolsa de voluntarios a quien el Departamento de Salud contactó para gestionar las colas del pabellón de Tarragona, y dar información sobre el proceso de vacunación a las personas que llegaban para vacunarse.

Lidia Plano, que ha cursado primero de Enfermería, explica que antes de la pandemia ya tenía muy claro qué quería estudiar y formar parte de un equipo sanitario, por eso, cuando recibió el correo del Departamento de Salud pidiendo voluntarios entre los estudiantes, pensó que era su momento. "Respondí rápidamente y aunque no podía vacunar, sí que podía ayudar en otras tareas, como informar a los usuarios, gestionar a las personas que iban al punto de vacunación, repartir mascarillas, supervisar la sala de reposo y expedir justificantes". Afirma que se siente "muy agradecida" de participar en lo que considera "el principio del final de la pandemia".

Los estudiantes voluntarios estuvieron en el pabellón deportivo desde el inicio de la vacunación masiva hasta final de curso contribuyendo a gestionar los flujos de personas que llegaban, en un punto en el que se administran 40.000 vacunas a la semana.