La Consejería de Bienestar Animal del Ayuntamiento de Tarragona pone en marcha estos días la prueba piloto en las 16 colonias de gatos salvajes de la ciudad que forman parte de la primera fase del protocolo para abordar la situación de las colonias de gatos de Tarragona. La ciudad cuenta con un total de 54 colonias (a día de hoy) controladas y gestionadas por 4 entidades que se han ocupado de ellas en los últimos años (Tarraco Gats, Donar per donar, Rodogats y Gaia).
Este 2020, con la situación de pandemia y debido a las restricciones, se ha tenido que actuar en dichas colonias puntualmente, adoptando horarios y proveyendo de carnés/permisos a las alimentadoras que no tenían para poder atender a los gatos con suficientes garantías de estar bien alimentados y cuidados. Al volver a la nueva normalidad, se ha detectado un aumento de la población, la necesidad de adecuar las colonias y la urgencia de realizar actuaciones para garantizar el bienestar animal.
Bajo el marco legal que nos ampara, las ordenanzas y decretos, y atendiendo las demandas de las entidades, en junio de este 2020 se empezó a elaborar el protocolo que vio la luz el pasado mes de noviembre.
Recordemos que este protocolo prevé actuar inicialmente en 16 colonias como prueba piloto, con la señalización de éstas; la instalación de elementos adecuados para la alimentación y refugio de los animales; y la esterilización de sus miembros conjuntamente con un control veterinario. Este punto incluye el marcaje auricular para identificar a los gatos ya controlados y la desparasitación externa e interna.
La elección de las 16 primeras colonias de gatos que participan de esta prueba piloto se ha llevado a cabo siguiendo tres criterios y se han priorizado aquellas que se ubican en espacios museizados, o en su entorno, con el fin de facilitar su autorización definitiva respetando el deber del Ayuntamiento de mantenimiento y cuidado de los espacios históricos de la ciudad; aquellas que han tenido episodios de quejas vecinales; y aquellas que por su población pueden poner en riesgo la convivencia de no actuarse de manera efectiva sobre su población.
Llegados a este punto, se acordó con las representantes de las entidades comenzar con las esterilizaciones y controles sanitarios (se hace ficha de cada gato/a) y ya se ha intervenido a cerca de una treintena de individuos. Este era el primer paso de la prueba piloto. A partir de hoy, 15 de diciembre, comienzan las tareas de señalización de las colonias y de adecuación según sus necesidades. Las colonias que se encuentran en lugares patrimoniales contarán con abreviaderos, comedores, areneros y algún refugio. Estos elementos se harán extensivos a las colonias de esta prueba piloto que lo requieran.
Según ha explicado la consejera de Bienestar Animal, Carla Aguilar-Cunill, esta mañana durante una visita a la colonia ubicada en el Paseo Arqueológico, "queremos que Tarraco sea amiga de los gatos, como lo hacen por ejemplo Córdoba, Pompeya, Roma y otras ciudades europeas que velan por el Bienestar Animal". Aguilar ha destacado que "este es un paso decisivo hacia el respeto de los animales. Nuestra tarea, junto con la de las entidades de la ciudad, nos ayudará a que, poco a poco, esta apuesta firme por el bienestar animal sea el punto de partida de un recorrido de consolidación con la convivencia entre seres vivos en nuestra ciudad cuidadora".
Trabajo coordinado entre consejerías
Estas actuaciones se han realizado en coordinación con el Área de Patrimonio del Ayuntamiento, conocedora de los lugares más sensibles y la legislación propia de éstos para poder realizar determinadas actuaciones éticas con los gatos y el entorno.
Tal como ha expresado el consejero de Patrimonio del Ayuntamiento, Hernan Pinedo, también presente en la visita, "Tarragona debe ser referente en el cuidado de los animales y los monumentos no se pueden quedar al margen. Debemos buscar la convivencia y seguir trabajando transversalmente como hasta ahora hemos hecho las dos concejalías para poder llevar a cabo este proyecto con el rigor que supone cualquier actuación en los recintos históricos"- y ha insistido – "Esta primera prueba piloto nos debe servir para poder llegar a lograr un encaje entre Bienestar Animal y Patrimonio. Por eso también se han tenido en cuenta las aportaciones de todas las partes implicadas de cara a trabajar estrechamente todas juntas en las próximas fases de este proyecto".
Recordemos que se trata de una prueba piloto y que, por tanto, se hará una primera valoración de esta puesta en marcha durante el primer trimestre del año que viene de cara a corregir alguna incidencia, ampliar la capacidad de alcance y añadir otras entidades que puedan sumarse al proyecto, donde se espera trabajar transversalmente con más áreas como ahora Limpieza Pública, Medio Ambiente y otras.
El presupuesto dedicado a este proyecto es de 20.000 euros, un 25% del cual se ha destinado al acondicionamiento del entorno (compra de comederos y bebederos, areneros y elementos de refugio) y un 75% a las actuaciones veterinarias. El consistorio preveía poder ejecutar esta prueba piloto hasta el 31 de diciembre de 2020 pero como consecuencia de las limitaciones provocadas por el estado de alarma inicial como también por el segundo, se está comenzando durante estas semanas con la señalización de las colonias seleccionadas y la compra de elementos de mejora del entorno. De cara a 2021, se iniciará el control veterinario y la esterilización que durará un máximo de 12 meses.