Comprar un décimo de la Lotería de Navidad es, para muchos, uno de los rituales más entrañables de estas fechas: elegir un número, compartir participaciones y alimentar la ilusión colectiva que cada 22 de diciembre reúne a familias, amigos y compañeros de trabajo ante el sorteo más esperado del año. Sin embargo, esta emoción no se vive igual en todas partes.
Aunque el sorteo lleva más de dos siglos celebrándose en España, todavía hay ciudades que no han celebrado nunca la llegada del Gordo. Entre ellas se encuentran Tarragona, junto con Ávila y Melilla, las tres grandes ausentes en el reparto del primer premio. En el extremo contrario se sitúan Madrid, con 84 ocasiones afortunadas, Barcelona (44), Sevilla (19), Bilbao (16), Valencia (15), Zaragoza (14) y Cádiz (13). Entre los municipios que lo han recibido solo una vez aparecen Girona, Guadalajara, Toledo y Jaén.
Tarragona cuenta con 14 administraciones de lotería, el doble que Ávila. Sin embargo, la ciudad continúa resistiéndose a estrenar su particular lluvia de millones. Los expertos atribuyen este fenómeno, más que al azar, al volumen de décimos consignados: cuantas más ventas, más probabilidades hay de que el premio acabe tocando. Por eso Barcelona, con un movimiento mucho más elevado de boletos, acumula tantas ocasiones premiadas.
Mientras tanto, ciudades como Reus sí que han tenido más suerte con la fortuna. En 2020, la ciudad vio cómo el Gordo, el 72.897, dejaba una auténtica lluvia de millones después de venderse 60 series del número agraciado.
Con el sorteo del próximo 22 de diciembre en el horizonte, Tarragona vuelve a cruzar los dedos. Quizás este año será, finalmente, cuando se rompa una racha que ya supera los 200 años.