El sobrino de la cocinera asesinada en Mas d'Enric el 13 de março de 2024 por un preso, Pablo Martínez, ha pedido la creación de una comisión de investigación en el Parlamento de Cataluña para esclarecer los hechos, depurar responsabilidades y para poder analizar con profundidad los protocolos que fallaron, así como los informes de los Mossos o el de Inspección de Trabajo que concluye que el Centro de Iniciativas de Reinserción no había evaluado el riesgo de violencia en la cocina de la prisión de El Catllar. Martínez ha hecho esta petición en la Comisión de Justicia celebrada este jueves. "Podemos trabajar para que no se cometa más una tragedia como la nuestra", ha dicho. Junts, ERC, Comuns y PSC se han comprometido a estudiarlo mientras que PP, VOX y Alianza lo han apoyado.
El representante de la familia de Núria López ha arrancado su intervención en la Comisión de Justicia y Calidad Democrática recordando que su tía fue "cruelmente" asesinada por un recluso en la prisión de Mas d'Enric de El Catllar. "Era una persona que trabajó durante años para poder tener una plaza pública en el CIRE, que creía en las segundas oportunidades. Era una mujer brillante, luchadora, empática, carismática, tenía muchos proyectos que le arrebataron", ha expresado.
Martínez ha pedido la creación de una comisión de investigación en el Parlamento porque la considera necesaria y también ha solicitado formar parte de ella. "Considero que no es lícito que se instrumentalice a nivel político una desgracia como esta, por eso, sin banderas, colores ni límites ideológicos pido a los diferentes grupos que la apoyen de manera unánime", ha reclamado.
Aunque el sobrino de la cocinera asesinada ha reconocido que la Administración de Justicia ha admitido que se produjeron una "serie de irregularidades" y que estas "se han considerado "negligentes", sostiene, que aún hay "muchas informaciones" que no se han tratado con profundidad. "Se han pasado de una forma bastante laxa y creo que son muy relevantes", ha añadido.
Martínez ha asegurado que su objetivo no es "señalar" a la anterior consejera de Justicia, Gemma Ubasart ni buscar un "enfrentamiento", sino que quiere trabajar para que no se vuelva a matar a un trabajador penitenciario. Con todo, ha cargado contra la comparecencia de la exconsejera, hecha en la Diputación Permanente en marzo de 2024, por considerar que el interno era un "preso modelo".
"La consejera decía que en su trayectoria penitenciaria nada hacía llamar la atención de que este hecho se pudiera producir, ponía énfasis en que era un hecho impredecible y aunque sea irreparable, no podían haber hecho nada para evitarlo. Yo creo que inicialmente puede ser que por la falta de información, ella lo veía así", ha dicho. Con todo, ha señalado que, ahora, con la información de los informes de criminalista de los Mossos d'Esquadra o del psicólogo que hizo el perfil del preso le "duele" el posicionamiento de Ubasart.
En este sentido, ha recordado que el recluso había manifestado afirmaciones "graves" y que no quería someterse a los programas de tratamiento. "Decir, claramente y con frialdad, que si tuviera que volver a matar lo haría, sin ningún tipo de arrepentimiento porque no tiene nada que perder sí que es un indicativo a tener en consideración para asignar un destino de confianza a un interno", ha defendido. Por eso, considera que se cometió un "error bastante grave" y que debería analizarse en profundidad para depurar responsabilidades.
También ha sugerido como uno de los motivos para dar luz verde a la comisión de investigación el hecho de averiguar por qué el preso volvió a trabajar en la cocina después de que agrediera a otro recluso. De hecho, ha recordado que el director de la prisión de Mas d'Enric pidió las medidas cautelares a los juzgados y unas horas después de que se levantaran. "Agredir a un interno dentro del centro penitenciario es una falta disciplinaria muy grave que implica la pérdida del destino y es considerada como una falta del reglamento penitenciario 108C. No se aplicó y se pidió que se levantaran las medidas cautelares. El motivo sería descubrir por qué", ha manifestado.
En su intervención, Martínez también ha aseverado que el culpable es el asesino de su tía, pero ha señalado que puede haber personas responsables que permitieran que pasaran los hechos. "Núria demostró que no quería estar con su asesino, planteó que otras personas ocuparan el lugar, había personas que tenían un interés, y desconozco por qué, en que el interno recuperara su lugar en la cocina", ha espetado.
A la vez, también ha puesto de relieve el informe de Inspección de Trabajo que concluye que el CIRE no había evaluado el riesgo de violencia en la cocina del centro penitenciario de Mas d'Enric y que tampoco "se adoptaron las medidas preventivas necesarias para garantizar la efectiva vigilancia de su integridad física" ni se impartió formación a la trabajadora en este sentido. "Son datos que son bastante relevantes para pasarlos por alto, como se ha pasado", ha remarcado el sobrino.
Por todo ello, considera que debería constituirse la comisión con todas las personas que integran el sistema penitenciario para que, sostiene, se pueda dar "claridad" a las negligencias cometidas.
Apoyo del PP, VOX y Alianza Catalana
El PP, Vox y Alianza Catalana han apoyado la propuesta de constitución de la comisión de investigación. Desde las filas de los populares, Alberto Villagrasa, ha afirmado que es importante que no se repita un episodio como la muerte de Núria. "Habiendo catorce evaluaciones sobre este preso, que ponían en duda precisamente su capacidad de reinserción por qué no se tuvieron en cuenta", ha expuesto como uno de los motivos para investigar los hechos.
Desde Vox han cargado contra la gestión del consejero Espadaler en el Departamento de Justicia por continuar con el "mismo camino" del gobierno anterior y han lamentado que no se hayan depurado responsabilidades entre la cúpula de los Servicios Penitenciarios. "Se reconocen negligencias, pero no se señalan responsables", ha dicho Sergio Macian.
Por su parte, Rosa Maria Soberana, de Alianza Catalana y portavoz del Grupo Mixto, ha asegurado que el asesinato de Núria no fue un accidente "inevitable", sino la consecuencia de la "falta de protocolos, de la desatención, de las advertencias de los sindicatos y de un sistema que reincorporó a un interno violento en un espacio que estaba expuesto a herramientas potencialmente mortales".
Junts, ERC, Comuns y PSC estudiarán la petición
Por el contrario, Junts, ERC, Comuns y PSC han respondido que deben estudiar la propuesta de la creación de la comisión de investigación. Por parte del partido de Puigdemont, Francesc Dalmases, ha apuntado que no cree que sea la herramienta para resolverlo. "Después de tu intervención, volveremos a reflexionar", ha aseverado. A su vez, Andrés García, de los Comuns, ha afirmado que tiene dudas sobre la comisión y considera que el Parlamento tiene "mucha responsabilidad" para garantizar una "mejor seguridad a los trabajadores en las prisiones".
Desde el PSC, Antoni Poyato, ha asegurado que no podrán reparar la pérdida de Núria, pero sí que pueden reflexionar y tomar medidas "para que esta situación no se vuelva a repetir". "La prueba de que las cosas no se hicieron bien, es que el gobierno ha tomado medidas para intentar minimizar los riesgos de estos trabajadores públicos", ha señalado.
"Quiero pedir disculpas"
La diputada del Grupo Parlamentario de Esquerra Republicana de Cataluña, Ana Balsera, ha pedido disculpas a los familiares de la cocinera por si "en algún momento no habéis sentido que hubiéramos estado a la altura", ya que eran entonces gobernaban la Generalitat. "Es obvio que el sistema falló. Si hay un asesinato en un centro penitenciario y más de una trabajadora, es que el sistema ha fallado y se debe reconocer, no valen excusas, es así, de claro, algo falló", ha subrayado.