La primera fase del tranvía del Camp de Tarragona conectará Cambrils y Vila-seca, con tramos con catenaria, mayoritariamente por cuestiones técnicas relacionadas con la antigua línea de ferrocarril. Actualmente se está ultimando el proyecto constructivo, que está "muy avanzado" y se espera que esté terminado a finales del primer trimestre de 2024.
Precisamente los tramos sin catenaria son los que están dando más trabajo, según han admitido desde Territorio. El principal inconveniente es que solo con las baterías de los trenes no se podría hacer todo el recorrido y, por lo tanto, será necesaria alimentación eléctrica. Una vez se haya cerrado el proyecto constructivo, el siguiente paso será licitar las obras. Un trámite que se quiere completar antes del verano para, a finales de año, empezar los trabajos. El objetivo del Gobierno es que el tranvía entre en servicio a finales de 2026.
Otro obstáculo que ha habido es la compra de los trenes. La primera licitación no se completó porque las dos ofertas no fueron satisfactorias: una porque el precio propuesto por la empresa era muy superior al fijado por Territorio y la otra porque el material ofrecido no cumplía los requisitos técnicos. A principios de año, presumiblemente en enero, se publicará una nueva licitación con un precio superior más ajustado al mercado.
Segunda fase
La segunda fase del proyecto prevé unir Reus y Tarragona, por Vila-seca y la Canonja. Los ayuntamientos presentaron alegaciones al primer estudio informativo de Territorio, que ahora el Departamento está terminando de analizar. Una vez el informe esté listo, se enviará a la dirección general de calidad ambiental para que haga la declaración de impacto ambiental, hacia el mes de febrero. Después habrá que realizar el proyecto constructivo.
