El alcalde de Salou, Pere Granados, ha pedido a la Generalitat, a través de una carta dirigida al consejero de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, y al vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que, como administración competente en materia de saneamiento, cumpla con su compromiso y dote de los suficientes recursos para garantizar la financiación de la obra de encauzamiento y nueva canalización del Barranco de Barenys.
Granados reclama la necesidad de dicha actuación "para evitar inundaciones con daños y desperfectos sobre los bienes públicos y privados", ya que, en momentos de tormentas y fuertes aguaceros, el barranco se ve desbordado, afectando, gravemente, al Barrio de la Salud. Un hecho que el alcalde califica como de "realmente, desolador", con unos efectos que son "inaceptables", y define la situación como "impropia de un país moderno del siglo XXI".
Granados también lamenta que este hecho "tiene un impacto negativo sobre la promoción y el prestigio de uno de los municipios turísticos más importantes de Cataluña, que tantos esfuerzos hace para mantener su litoral en estado óptimo".
Granados asegura que los salouenses, las salouenses y el sector turístico "no toleraremos, por más tiempo, esta situación, cuando nuestra apuesta de futuro pasa por reforzar aquellos aspectos que nos garanticen una ciudad sostenible, respetuosa y protectora del medio ambiente, y la mejora de la calidad de vida de su población y de sus visitantes", en la que "nos jugamos todos nuestros esfuerzos invertidos y el futuro de la economía de nuestro municipio".
Por esta razón, Granados exige al consejero Damià Calvet, y al vicepresidente Pere Aragonès, que asuman "su responsabilidad y obligaciones", con una inversión comprometida por la Generalitat, mediante convenio firmado en marzo de 2015.