Así, de enero a junio de 2023, se ha superado, cada mes, el número de entradas, con relación al año pasado, así como el número total de pernoctaciones.
Mientras que el total de visitantes del primer semestre de 2022 fue de 796.836 personas, este 2023 se han registrado 893.618, durante el mismo período, lo que significa un 12,14% más.
En cuanto a pernoctaciones, el primer semestre de 2022 fueron 2.510.584; y este año han sido 2.754.283, un incremento, prácticamente, de 10 puntos (9,7%).
El alcalde de Salou, Pere Granados, destaca el mercado nacional “como el principal que visita nuestro destino, aglutinando la mitad de las pernoctaciones”, esto es 50,6%, “un hecho de gran valor, dado que se trata de un público más cercano a la fidelización y a la repetición de la visita”. Además, “aporta una resiliencia mayor, gracias a la facilidad de movilidad y de hacer escapadas fuera de la temporada”.
A escala internacional, los británicos se han situado en segundo lugar, incrementando, sensiblemente, su cuota hasta el 15,07%, mientras que los franceses se han mantenido, prácticamente, en las mismas cifras, pero, en tercer lugar, con un 12,9% respecto al 13,6%, de 2022.
El público irlandés continúa incrementando su presencia en el municipio, llegando, casi, al 10%, cuando en el mismo período del año anterior registraba un poco más de un 6%. Un público muy bien valorado, dado su grado de repetición, su perfil de familia numerosa y su rutina de gasto en el municipio.
Cabe decir que esta mejora de los resultados se ha manifestado durante cada mes del año y ha sido superior respecto al mismo mes del año anterior; un hecho que muestra, también, “cómo el turismo desestacionalizado, fuera de temporada, tiene margen de crecimiento en el municipio y se manifiesta cada vez más”, afirma el alcalde de Salou.
Si la comparación se lleva a cabo con la buena temporada de 2019, seguimos aún con un incremento de visitantes de un 14,3%, aunque las pernoctaciones bajan poco más de un 5%, un hecho debido a la procedencia de los visitantes, ya que no hay actividad posible con mercados lejanos tradicionales, como el ruso o el ucraniano, los cuales tenían una influencia muy significativa sobre las cifras de pernoctaciones del municipio de Salou.