El Grupo Municipal de Ciudadanos (Cs) Reus ha pedido al Ayuntamiento "más medios y más agentes de la Guardia Urbana". Estas son dos de las medidas que incluye una moción presentada para mejorar la seguridad en la ciudad y que se debatirá en el plenario de este viernes.
La portavoz municipal de Cs, Débora García, ha explicado que "la tasa de policías locales recomendada es de 1,8 por cada 1.000 habitantes, pero en Reus es de 1,33 por millar de habitantes". Por eso, Cs reclama que "para llegar a la ratio propuesta por la Unión Europea, la Guardia Urbana incorpore 10 nuevos agentes durante este 2020, y del 2021 al 2023 el incremento sea de 20 nuevos policías cada año".
La moción presentada por Cs también propone medidas como "dotar a la Guardia Urbana de todos los medios de defensa y actuación adecuados, como chalecos antibalas o pistolastaser" y "crear una unidad de intervención rápida, con una formación específica, para luchar contra la ocupación ilegal de inmuebles", ha explicado García.
Otras acciones propuestas por Cs y que recoge la moción pasan por "incrementar el número de cámaras de seguridad, garantizando el respeto y protección de los derechos fundamentales de los vecinos" y por "diseñar estrategias de actuación de los servicios sociales para prevenir determinados delitos". El texto planteado por Cs también reclama al gobierno municipal que "explore la opción de cubrir posibles situaciones excepcionales con colaboración de servicios de seguridad privada".
Finalmente, García ha destacado que "Reus, con unas características propias, necesita diseñar una política de seguridad que garantice la prevención de delitos que pueden derivar en tensiones sociales" y ha remarcado que "no se pueden proponer soluciones simples a problemas complejos". "Por eso, estrategias de seguridad, libertad y protección social son políticas que se refuerzan mutuamente", ha concluido.
Por otro lado, Ciudadanos ha presentado también otra moción que reclama que "los grifos tradicionales se sustituyan por unos automáticos en los lavabos de los edificios e instalaciones municipales, ya que de esta manera el usuario no tendría que tocarlos". Según García, "se trata de una medida más para combatir la propagación de la COVID-19 en nuestro municipio".