En el marco del debate sobre infraestructuras energéticas, Esquerra Republicana ha reafirmado su oposición al proyecto privado de línea de Muy Alta Tensión (MAT) propuesto por la empresa Forestàlia, conocido como LUPUS, que conectaría Huesca con Hostalets de Pierola, en la Anoia.
Esta iniciativa ha reunido este jueves en el Parlament una representación conjunta de los diputados republicanos y diversos responsables municipales de los territorios afectados por la futura infraestructura, que prevé entrar en Cataluña desde Aragón.
Entre los asistentes figuraban el diputado en la Diputación de Tarragona y alcalde de Els Garidells, Marc Bigordà Prió; las alcaldesas de Solivella y Senan, respectivamente Rosa Maria Salvado Pijuan y Carme Ferrer; así como los alcaldes de l'Espluga de Francolí, Josep Maria Vidal, y de Hostalets de Pierola, Gerard Parcerisas Valls. También participó el consejero comarcal del Segrià, Josep López Blanco.
Oposición unánime a los proyectos privados de especulación energética
Todos estos cargos públicos expusieron ante los medios su disconformidad con el proyecto LUPUS, poniendo énfasis en la persistencia del gobierno estatal en promover infraestructuras energéticas gestionadas por empresas privadas que consideran perjudiciales para el territorio.
Durante una rueda de prensa celebrada en el Parlament, la diputada de Esquerra Republicana Montse Bergés transmitió el malestar de los representantes locales e insistió en la necesidad de adoptar un modelo energético basado en criterios de kilómetro cero, participación ciudadana y justicia territorial. Bergés recordó que hace dos años esta misma formación política ya había conseguido detener otros proyectos similares impulsados también por Forestàlia.
La exigencia al Govern catalán para que actúe contra Forestàlia
Asimismo, la diputada exigió al Ejecutivo catalán que tome medidas firmes para impedir la implantación de esta infraestructura privada. En este sentido, Esquerra ha pedido que tanto la consellera de Territori i Transició Ecològica, Sílvia Paneque, como la directora general de Energía designada por el Govern presidido por el PSC den explicaciones detalladas ante el Parlament sobre las acciones previstas respecto a este proyecto.
Bergés también recordó que el Partido Socialista se comprometió en el acuerdo de investidura a defender un modelo energético coherente con estos principios; por ello, no oponerse al proyecto LUPUS supondría una vulneración directa del pacto político establecido entre ambas fuerzas.