El PP quiere acabar con las pintadas de las fachadas de Tarragona
La portavoz del Grupo Municipal hace un llamamiento a erradicar las pintadas en la ciudad y a castigar a los incívicos
17 de enero de 2024 a las 16:28h
El PP quiere acabar con las pintadas de las fachadas y muros de la ciudad. El grupo municipal plantea aplicar las ordenanzas para disuadir a los vándalos a la realización de los actos incívicos y transmitir un mensaje de tolerancia cero. La portavoz Maria Mercè Martorell defiende castigar a los incívicos, multando las infracciones y obligando a reparar los daños.Se trata de la moción que ha preparado el Grupo Municipal del PP para el pleno ordinario de este viernes y que pretende poner manos a la obra en uno de los problemas que tiene Tarragona. “Las pintadas son cada vez más presentes en las fachadas de los edificios de la ciudad. Tenemos una ciudad Patrimonio Mundial, y su imagen se ve menoscabada”, ha expresado Martorell en rueda de prensa, donde ha manifestado que las pintadas generan un impacto muy negativo y una sensación de abandono e inseguridad muy notoria.El PP quiere establecer un plan de limpieza para retirar eficazmente las pintadas en edificios, espacios públicos e infraestructuras y detectar a los infractores aprovechando las cámaras de videovigilancia y las patrullas de proximidad de la Guardia Urbana. “Tolerancia cero con las pintadas. Necesitamos que se cumpla la Ordenanza General de Convivencia Ciudadana y aumentar las sanciones económicas previstas”, ha indicado la portavoz. Martorell ha explicado que proponen potenciar el ejercicio de la acusación particular por parte del ayuntamiento y abrir una línea de subvenciones para favorecer el uso de un barniz antipintada en las fachadas de plantas bajas de edificios de nueva construcción y de los que las rehabiliten.El grupo también contempla la promoción de campañas de concienciación y facilitar canales de comunicación anónimos y gratuitos para informar al consistorio de los actos incívicos. “El Ayuntamiento debe hacer todo lo que esté en sus manos para erradicar las pintadas y debe aplicar las ordenanzas y castigar a los incívicos para conseguir la capital que todos merecemos y queremos: una capital limpia, ejemplar y libre de pintadas”, ha concluido Martorell.
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