Estos últimos días, el festival de música Pintor Rock ha llenado el Parc de la Festa de Reus con miles de personas que han querido disfrutar de algunos de los mejores artistas del panorama. Sin embargo, parece que en esta edición las canciones y los grupos han quedado en un segundo plano, ya que la polémica por diversas conductas incívicas se ha convertido en el debate principal en la capital del Baix Camp.
El Pintor Rock se ha celebrado entre los días 30 de octubre y 1 de noviembre en el Parc de la Festa, un espacio mucho más grande que en otras ediciones y con mayor facilidad de acceso para los usuarios. Sin embargo, desde muy pronto algunos residentes de las calles cercanas se quejaron por diversos actos incívicos de los propios aficionados. Personas defecando y orinando en las zonas verdes cercanas y la cantidad de suciedad que generaron hicieron estallar a los vecinos, los cuales pusieron el caso en conocimiento del Ayuntamiento.
El consistorio explicó que si no hacen cambios organizativos rechazará una nueva edición del Pintor Rock
De esta forma, ayer el consistorio emitió un comunicado donde reclamaba una actuación inmediata de los organizadores para detener estas conductas. Además, confirmaron que se vieron obligados a reforzar servicios municipales de Limpieza y de la Guardia Urbana con el objetivo de minimizar las molestias a los vecinos y vecinas y garantizar la seguridad y la salubridad alrededor del recinto.
A pesar de ello, el clima de crispación e indignación no afectó solamente a los vecinos de los edificios cercanos. Los mismos asistentes al festival denunciaron a los organizadores que alguien había robado varios móviles, generando un clima de inseguridad importante. Por este motivo, los responsables emitieron un comunicado pidiendo a los aficionados que "vigilaran bien sus bolsillos y riñoneras", a la vez que pedían que cualquier movimiento extraño o sospechoso notificaran los hechos al personal de seguridad o al Punto Lila e Irisado.
El Pintor Rock finalizó ayer por la noche y se han generado muchas dudas sobre si el año que viene el Ayuntamiento de Reus aceptará la celebración de este en el Parc de la Festa. Aunque todo apuntaba a que el festival sería una oportunidad perfecta para disfrutar de la mejor música del panorama, los incidentes y las molestias generadas han provocado un gran malestar entre los vecinos y las instituciones. De esta forma y tal como recogía el comunicado del consistorio, si no se produce una mejora significativa en la gestión por parte de la organización privada del evento, la capital del Baix Camp rechazará una nueva edición en su territorio.
