El pasado día 12 de julio, un voluntario de una asociación sin ánimo de lucro, encargada del control de las colonias de gatos radicadas en las Urbanizaciones de Rodolat del Moro y Sant Pere i Sant Pau, se encontró un gato moribundo en las proximidades de su hogar.
El gato presentaba un cuadro clínico de vómitos y convulsiones y, a pesar de haber solicitado su rápida asistencia, murió. Estos hechos fueron puestos en conocimiento del SEPRONA de la Guardia Civil de Tarragona. La investigación descubrió que el gato estaba en perfectas condiciones el día anterior, confirmando las sospechas. Envenenar cualquier tipo de animal a través de un cebo, si no estás autorizado para ello, se considera un delito.