Gracias a un divertido y pedagógico juego de pistas, los niños y las niñas de Roda pudieron encontrar al Paje Real y entregarle sus cartas para los Reyes de Oriente.
Durante los días 28 y 29 de diciembre, la concejalía de Cultura puso en marcha la cuarta edición del juego “Encontremos al Paje Real”, una actividad en la que participaron más de doscientos niños y sus familias.
El Paje Real llegó a Roda de Berà el jueves, pero se perdió y decidió esconderse en un edificio emblemático del municipio. Los niños, a través de varias pistas con códigos QR, debían encontrarlo.
El juego comenzó en la plaza del Ayuntamiento, donde se les entregó la boleta de participación que debían ir rellenando con gomets de colores a medida que iban avanzando el juego, hasta completar las seis pistas, la última de las cuales les llevó hasta el lugar donde el Paje se había escondido.
La primera pista fue en el Horno de Cal Niceto, en la calle Vendrell, donde en 1975 abrieron el horno de pan; el segundo lugar fue Ca l’Oliverar, un gran casal del siglo XVIII, actual sede de Les Monges Associació Cultural; a continuación fueron a Cal Gassó, un gran edificio situado en la calle del Pozo, propiedad de la cual fue una de las principales sagas del campesinado rodense; la cuarta pista les condujo hasta Ca la Martorella, una casa solariega de finales del siglo XVII, situada en la calle del Agua; la quinta pista estaba en Cal Borrissol, el parque lúdico de la calle Montjuïc propiedad del Ayuntamiento; y, finalmente, los niños y niñas se desplazaron hasta el Punto de Información Juvenil “La Fábrica”, donde el Paje Real les esperaba.
Una vez allí, los niños bien ilusionados le entregaron sus cartas y se hicieron fotos con él. Ahora, la misión del Paje es hacer llegar las cartas de los niños y niñas de Roda a los Reyes de Oriente, los cuales llegarán por mar el día 5 de enero a las cinco de la tarde.