Después de la reunión realizada el jueves para evaluar la propuesta de normativa para limitar el acceso y la circulación de vehículos de la Zona de Bajas Emisiones en Tarragona, que entrará en vigor en 2024, el Grupo Municipal Tarragona En Comú Podem la cataloga como pobre y poco valiente.
Los puntos principales de divergencia son varios. Por un lado, consideran que se debe estudiar si la delimitación geográfica debería ampliarse hasta el Hospital Joan XXIII, ya que es una zona de alta sensibilidad ambiental y que debería protegerse también con la reducción de gases nocivos.
Aparte, en la formación morada consideran que hay demasiadas excepciones para poder entrar en la ZBE y algunas incoherencias y esto hace prácticamente inexistente la regulación. Por ejemplo, los vehículos extranjeros pueden estar exentos de esta.
En total hay más de 30 supuestos en los cuales la normativa puede no aplicarse, haciendo que la misma sea inoperante. Sobre esto, el representante de la coalición progresista, Toni Carmona, añade: “Una propuesta de mínimos no solucionará el problema real que tenemos, hay que sacar de las calles de la ciudad los vehículos más contaminantes”.
Desde En Comú Podem preparan una serie de aportaciones para conseguir cambios sustanciales que vayan en consonancia con la emergencia climática en la cual vivimos. El portavoz del grupo municipal, Jordi Collado ya advirtió en el pasado pleno de diciembre al ayuntamiento, en respuesta a una moción de VOX en contra de la ZBE, que se trataba de una propuesta muy floja y del todo insuficiente por parte del gobierno.