La Guardia Urbana de Tarragona efectuó el sábado por la noche dos detenciones en actuaciones diferentes. En el primer caso, un hombre de 48 años fue arrestado como presunto autor de un delito de hurto tras ser localizado circulando con un patinete eléctrico sustraído. Según fuentes policiales, la víctima del robo pudo seguir el vehículo a través de una aplicación de localización y colaboró con los agentes para encontrarlo.
Alrededor de las 21.20 horas, la sala de coordinación recibió el aviso del hurto y envió varias patrullas a la zona indicada por el sistema de seguimiento. El denunciante, que se había presentado en comisaría, acompañó a los agentes durante la búsqueda, que les condujo hasta la N-340, en el barrio de Torreforta. Allí vieron a un hombre que conducía un patinete coincidente con la descripción facilitada.
Una vez detenido, el propietario reconoció el vehículo y la policía lo confirmó comprobando el número de serie. El hombre fue detenido y trasladado a dependencias policiales acusado de un delito de hurto.
Segunda detención por desobediencia y amenazas
Poco después, a las 22.50 horas, los agentes practicaron una segunda detención en la plaza Catalunya. En este caso, un hombre de 35 años fue arrestado por resistencia, desobediencia a la autoridad y amenazas leves.
Los hechos comenzaron cuando una patrulla acudió a la zona para responder a las quejas de vecinos que alertaban de una mujer alterada que gritaba en la calle. Mientras los agentes intentaban hablar con ella, un hombre se acercó para interferir en su actuación. A pesar de las advertencias repetidas para que se alejara por motivos de seguridad, el individuo hizo caso omiso y se negó a identificarse.
Según la policía, el hombre reaccionó con actitud agresiva, amenazando a los agentes e intentando huir mientras golpeaba y movía los brazos para resistirse. Finalmente, fue reducido y detenido.
Ambos arrestados fueron trasladados a las dependencias policiales para instruir las diligencias correspondientes.
