La URV participa en un estudio para predecir patrones de viento en la Península

22 de mayo de 2023 a las 11:21h

Un estudio realizado por el Centro de Cambio Climático C3 de la Universitat Rovira i Virgili y el Centro de Investigaciones sobre Desertificación (CSIC-Universitat de València) y la Generalitat Valenciana, ha analizado por primera vez datos de velocidad media y ráfagas máximas de viento en la Península Ibérica, empleando técnicas de análisis espectral para el análisis de la periodicidad. Los resultados obtenidos, publicados en la revista Geophysical Research Letters, han permitido observar patrones con los que mejorar la predicción estacional del viento, lo que podría tener implicaciones socioeconómicas y ambientales para la producción de energía eólica, entre otros usos.

Entre las conclusiones del estudio se ha observado que cuando el vórtice polar (una gran área de baja presión y aire frío que rodea los polos de la Tierra) se encuentra debilitado, como ocurre con una situación de calentamiento repentino estratosférico (evento en el que la temperatura de la estratosfera polar aumenta decenas de grados), los vientos soplan más fuertes entre dos y tres meses después. Por otro lado, también se ha podido determinar que no hay correlación entre la velocidad media del viento en superficie y las ráfagas máximas en períodos superiores a los nueve años, situación que se agudiza en verano y que disminuye en invierno.

Para la realización de la investigación se han aplicado dos técnicas, conocidas como multitaper, con la cual se estima la densidad espectral para detectar cualquier periodicidad en los datos; y wavelet, con la que se pueden localizar estas periodicidades en el tiempo. El análisis a partir de los espectros ha permitido identificar patrones de comportamiento que ayudan al equipo investigador a determinar si es posible encontrar fuentes de predictibilidad en la velocidad del viento o si, por el contrario, su comportamiento es caótico. Asimismo, también han podido determinar correlaciones desfasadas en el tiempo que tienen cierta periodicidad entre la velocidad del viento y otras variables climáticas de interés.

 

El sistema climático

Como manifiesta Eduardo Utrabo, investigador del CSIC en el CIDE, “los análisis en el dominio de la frecuencia, como las aplicadas en este estudio, son ideales para estudiar los patrones climáticos de fenómenos como El Niño – Oscilación del Sur”.

En el sistema climático hay oscilaciones que se repiten con períodos de tiempo concretos a lo largo de los años. Uno de los ejemplos más conocidos es El Niño – Oscilación del Sur, que afecta a gran parte del clima mundial y que consiste, entre otros elementos, en la variación de la temperatura superficial del agua del Pacífico ecuatorial oriental cada cierto número de años. El Niño y la Niña se corresponden, respectivamente, con la fase cálida y fría de este patrón. Cada fase conlleva una señal característica en los vientos y en las precipitaciones tropicales que tienen repercusiones globales.

El estudio de estos patrones es muy importante, ya que son una de las principales fuentes de predictibilidad a escala estacional. “Los datos obtenidos son de alta aplicabilidad sectorial, como por ejemplo en la producción de energía eólica o en la dispersión de contaminantes y de gases con efecto invernadero”, sostiene Manola Brunet, directora del Centro de Cambio Climático de la URV C3 y una de las autoras del estudio.