La primera obra de Gaudí en Tarragona abre las puertas al público

03 de julio de 2017 a las 15:53h

La apertura al público del Santuario celebra y reivindica el papel protagonista de Tarragona como lugar de origen de la devoción a la Virgen del Sagrado Corazón y como ciudad de acogida del joven Antoni Gaudí y de su primera y más desconocida obra.

Conocida popularmente como la Iglesia del colegio de Jesús y María de Tarragona, el Santuario de Nuestra Señora del Sagrado Corazón está considerado como el primer Santuario de España dedicado a la Virgen bajo la advocación de Nuestra Señora del Sagrado Corazón. De esta manera, Tarragona se convierte en el año 1857 en la primera ciudad española en acoger esta devoción, de la mano del Padre Jouet y de las monjas de la Congregación de Jesús y María, provenientes de Issodoun (Francia).

Además de ser el primer lugar de culto a la Virgen del Sagrado Corazón, también suma la importancia de ser la primera obra arquitectónica de Antoni Gaudí. El ilustre arquitecto diseñó el Santuario a pesar de ser estudiante de arquitectura. La obra es además la primera documentada de Gaudí que se conserva en Tarragona.

La visita a la primera y única obra de Gaudí en Tarragona, punto de inicio de la ruta modernista

El patrimonio modernista es uno de los grandes valores y atractivos culturales de Tarragona, pero al estar diseminado en viviendas, escuelas u otros espacios privados, a menudo queda oculto a los visitantes, e incluso a los propios tarraconenses. La consejera de Turismo, Inma Rodríguez ha explicado: "A partir de la apertura al público de la que está considerada como la primera obra de Gaudí, todo el patrimonio modernista de la ciudad se integra por primera vez en la oferta turística de Tarragona con un kilómetro cero único, 'la primera obra de Gaudí'". El gerente de Expertus Turismo y Ocio, Francisco Javier Castillo, ha destacado la iniciativa como un ejemplo de innovación "la colaboración público-privada nos ha permitido poner en valor una pieza única de la obra de Gaudí y abrirla a la ciudadanía". Por su parte, el rector del Santuario y delegado de Patrimonio Artístico y Documental y Arte Sacro del Arzobispado, el sacerdote Antonio Martínez ha detallado el gran valor artístico de la obra y ha explicado que la apertura al público permitirá obtener fondos para restaurar el monumento y mejorar la visita.

El Santuario será punto de partida de la ruta modernista de la ciudad. Durante el mes de julio, se podrá visitar de lunes a sábado de 11h a 14h y de 16h a 19h y en agosto también abrirá el domingo. Las entradas se pueden adquirir a través de la web del Patronato de Turismo.

La ruta modernista, contempla la visita al resto de edificios modernistas de la ciudad, proyectados por arquitectos tarraconenses como Josep Maria Jujol, Josep Maria Pujol de Barberà, Ramon Salas Ricomà, Pau Monguió Segura o Lluís Domènech i Montaner.

La primera y más desconocida obra de Gaudí

"Dirigida por un hábil arquitecto, se construyó una esbelta iglesia" (Canónigo Ramon Vionnet). El Santuario fue proyectado en 1877 y se terminó en 1882. La capilla fue bendecida en 1879 por el vicario general Joan Baptista Grau Villaspinós, quien años más tarde sería obispo de Astorga.

El estilo arquitectónico del Santuario, neogótico y modernista

La Iglesia de Jesús y María es de estilo neogótico y modernista, un espacio de tres naves subdividido por doce columnas de hierro colado, esbeltas y ornamentadas con decoración floral geometrizada. El templo tiene una gran similitud con la capilla del palacio episcopal de Astorga (León), encargada por el ya obispo de Astorga, Dr. Joan Baptista Grau Villaspinós, a Gaudí. El obispo fue protector del arquitecto cuando aún era canónigo y vicario general del Arzobispado de Tarragona.

La Marca Gaudí

La iglesia dispone de coro y camarín y en muchos de sus elementos observamos la marca del genial Antoni Gaudí. El altar de la capilla es la parte con mayor huella de Gaudí y un ejemplo de su estilo arquitectónico: los arcos de catenaria de la cúpula del camerino, un magnífico altar de mármol y alabastro policromado con escaleras para llegar al sagrario u ostensorio redondo de madera sobredorada de enormes proporciones, que se apoya sobre una columna de mármol y que, al abrir las dos puertas, muestra realzando al Santísimo Sacramento, y por encima, a la imagen de la Virgen.

Algunos de estos elementos han permanecido inalterados, como el pavimento con mosaico teselado, o los inconfundibles arcos de catenaria del tambor de la bóveda que lo hicieron mundialmente famoso. Otros, como la primitiva imagen de la Virgen, el sagrario o el sitial conventual, desaparecieron en 1936. El manifestador (sagrario) actual es una réplica exacta de Ferran de Castellarnau.

La intervención del arquitecto en la calle Méndez Núñez está declarada Bien Cultural de Interés Local.

El Gaudí más íntimo y personal

Gaudí tuvo una única sobrina, Rosa Egea Gaudí. La muerte prematura de la madre convirtió al arquitecto en su tutor e ingresó a la niña en el colegio religioso de Jesús y María. En agradecimiento y para hacer frente a los gastos, propuso hacer la obra que ahora conserva la capilla.

Además de conocer su ópera prima, la visita a la Capilla permite conocer los inicios de Gaudí y el claro vínculo que durante muchos años mantuvo con Tarragona, mostrando la parte más personal y humana de la historia de este catalán universal.

El canónigo Magistral de la Catedral de Tarragona, Ramón Vionnet, y las monjas de Jesús y María encargaron a un joven Gaudí, aún estudiante y próximo a graduarse en arquitectura, la proyección del altar de la capilla de la Iglesia de Jesús y María . A cambio de la educación de su sobrina Rosa Egea Gaudí, de quien el arquitecto era tutor, Gaudí realizó la que está considerada su ópera prima.