El Ayuntamiento de Vila-seca ha anunciado que próximamente instalarán biotopos marinos ecológicos en cumplimiento de uno de los acuerdos del gobierno municipal con Vila-seca en Comú para no oponerse al presupuesto del ejercicio 2020. Estos biotopos cuentan con la financiación de Repsol. Desde 2012, ya se han colocado un total de 135 ejemplares en Altafulla, Torredembarra, Tarragona, Salou, l'Ametlla de Mar y l'Hospitalet de l'Infant.
Los biotopos artificiales son grandes piezas de obra y de piedra de forma cónica que, por su diseño y materiales, atraen la flora y la fauna marinas formando un arrecife. Miden entre 1,30 y 2,00 metros de altura, por 1,50 metros de anchura, y su peso oscila entre los 800 y los 1.600 kilos. Están hechos de un cemento de PH neutro específico para el mar, que se suele utilizar en obras submarinas, y de carbonato de calcio. Tienen formas y tamaños diferentes, en función de la profundidad del punto donde se quieren colocar, e incluyen multitud de cavidades, grandes y pequeñas, que se convierten en metros de habitabilidad para las especies existentes, las cuales encuentran protección y refugio en momentos de temporales.
A diferencia de las boyas convencionales, que tienen como base bloques rectangulares de hormigón que se quitan y se ponen cada temporada, los biotopos artificiales se instalan de forma permanente. Cuando termina la temporada de verano, se retira la cadena superior y la boya de plástico que flota en el agua. El biotopo y toda la vida marina que se ha generado se deja en el fondo marino hasta el verano siguiente, cuando unos submarinistas localizarán por GPS la posición exacta del biotopo para colocar nuevamente una boya. Los biotopos, además, incorporan un innovador sistema de boya intermedia que hace que la cadena sobrante de la boya que flota quede en suspensión y no se dañe el fondo marino cuando hay temporal u oleaje fuerte.
Desde Vila-seca en Comú se muestran muy satisfechos. Mario Téllez, portavoz de los Comunes, ha querido rememorar que en la última legislatura ya lo propusieron pero "inexplicablemente" la mayoría absoluta de Poblet lo tumbó. Por este motivo ha querido manifestar su satisfacción de ir consiguiendo hitos que antes "chocaban con el muro de la mayoría absoluta". No obstante, advierte que es una primera piedra. Para conseguir la preservación del fondo marino se requiere "una apuesta decidida y global que vaya más allá de la implantación de boyas de balizamiento ecológicas" asegura.