La comunidad universitaria comienza a decidir en las urnas su futuro
15 de mayo de 2018 a las 09:41h
Hasta un total de 16.071 personas integrantes de la comunidad universitaria están llamadas a votar este martes para decidir quién encabezará el rectorado en el nuevo mandato. Después de una campaña polémica en la que María José Figueras se ha enfrentado con Josep Anton Ferré, el actual rector, ahora son los estudiantes, PAS y PDI los que tienen la palabra. A las diez de la mañana han votado los dos candidatos y a las seis de la tarde está previsto que se proclamen los resultados, una hora después de que se cierre la jornada. La afluencia de votantes a uno de los campus más grandes de la universidad, el Campus Catalunya, no era especialmente alta a primera hora de la mañana. Una de las votantes, Maria Teresa Bargalló (PAS), reconocía que "los estudiantes son los más reticentes a la hora de participar". Y es que la mayoría de los que han emitido el voto eran trabajadores, tal como es habitual. Jordi, un estudiante que sí ha votado, explicaba que "aunque la gente no se lo cree, los estudiantes tenemos mucho peso". En total son 13.295 estudiantes de grado, máster, doctorado y otros títulos, pero el voto es ponderado: su voto tan solo contará hasta un 26% del total. Una universidad consolidada Entre los votantes hay de más y menos convencidos con el rumbo de la Universidad, pero sí que destacan su consolidación en el ranking de las mejores del Estado. "La coyuntura ha afectado a todas las universidades, pero otras tienen un patrimonio detrás, la URV debe acceder a más presupuesto", explicaba Maria Teresa Bargalló. Hacen falta mejoras Independientemente de quién sea el ganador de la jornada, los miembros de la comunidad universitaria señalan mejoras necesarias para los próximos años. Es el caso, por ejemplo, de la construcción de la nueva facultad de Educación, en el mismo Campus Catalunya, y que próximamente estará en marcha. Aun así, hay quien apunta que hacen falta mejoras más profundas: "He votado en contra del actual rector por las condiciones de las aulas, por la falta de enchufes, por los precios del bar...", explicaba Sergi Chavarrier. Este estudiante recoge algunas de las demandas históricas de su comunidad y que todavía no están resueltas, como la ampliación de los horarios de las bibliotecas en periodo de exámenes. "Espero que sea útil y que represente un cambio, un golpe de timón", decía al acabar de votar.