Aunquetodosesperabanlanoticia,finalmenteJuntoshadecididono entrar en elgobiernode RubénViñualesy acabar elmandatoala oposición. Unadecisiónquevaprovocar lamarchade la consellera Elvira Vidal delgrupo.Hablamosde estepactofrustradoide losprincipalestemas que hanmarcadolosdosprimerosañosael Ayuntamiento con su portavoz Jordi Sendra.
Juntos finalmente ha decidido no entrar en el gobierno municipal. ¿Esta noticia cambia el talante de su grupo con los socialistas? El escenario postelectoral dejó un gobierno que necesitaba apoyos para aprobar temas importantes como las ordenanzas, los presupuestos o el contrato de la limpieza. Estos dos años, con inteligencia política y discreción, hemos negociado con el alcalde desde fuera temas importantes. Si hubiéramos entrado en el gobierno, habríamos eliminado intermediarios. Pero había más negatividades que positividades. Estos dos años seguiremos haciendo lo mismo que hasta ahora: poner proyectos sobre la mesa.
¿Cuáles son los proyectos más destacados que han acordado?Proyectos tanto materiales como inmateriales. Por ejemplo, le voy a pedir hacer hijo predilecto mosén Fort, que no vale dinero. Otros acuerdos son subvencionar entidades sociales como la Guingueta, la peatonalización de la primera coca de la Rambla, el Hostal del Sol, la Quinta de Sant Rafael o el asfaltado de polígonos. La reapertura de la oficina del catalán nos hace pensar que somos realmente útiles y decisivos. Es un éxito rotundo. Si no hubiera sido Junts, nadie lo habría pedido. Esquerra ni se recordaba.
“La reapertura de la oficina del catalán nos hace pensar que somos realmente útiles y decisivos”
Se habían ofrecido públicamente a entrar en el gobierno. ¿La decisión de no dar el paso está tomada en clave local o de país? Habíamos dicho que teníamos un gobierno en minoría y pusimos a disposición todo el talento y las ganas de trabajar. Cuando a nivel local analizábamos las negatividades, observábamos que corríamos el riesgo de quedar disueltos como un terruño de azúcar dentro del gobierno en un periodo casi electoral. Somos tres concejales y ellos son nueve. Habíamos tenido que asumir decisiones sin estar a favor.
Presentó el acuerdo al presidente local del partido, al secretario general Turull y al presidente Puigdemont, aparte de otras personas. Me hicieron ver que había otras negatividades. Nuestro proyecto político no es el del presidente Illa, sino el de Junts. Nos habría costado defenderlo desde dentro del gobierno. Había también una clave nacional, pero sobre todo se tomó en clave local.
Hemos visto que en municipios como Ripoll la dirección ha interferido en pactos locales. ¿Falta autonomía municipal en el partido? En la reunión con el secretario general y el presidente Puigdemont recibí un mandato de carta blanca. Me hicieron las consideraciones que correspondían, pero la decisión la tomé yo. La compartí con Pep Manresa y Elvira Vidal. Ellos estuvieron de acuerdo. Otra cosa es que después hubiera una concejala que dijera que no lo estaba y se marchara. De hecho, me sobró que aceptara las negatividades y me lo comprara todo cuando hablamos. Pero repentinamente me dijo que no estaba de acuerdo y que no vendría a la rueda de prensa.
Dijo que no se le había hecho partícipe de las negociaciones.Las negociaciones corrían un riesgo. Si lo compartes con demasiada gente, se acaba sabiendo todo. Primero, pedí confianza a los dos concejales y voy a negociar con el alcalde en absoluta discreción. Después pude explicarlo a mi partido también en discreción. Finalmente, lo expuse a los dos concejales y los tres vamos a estar de acuerdo en no entrar.
“Corríamos el riesgo de quedar disueltos como un terruño de azúcar dentro del gobierno del PSC”
Elvira Vidal es una tránsfuga?No sé si lo es. Pienso que es una persona que se presentó bajo el paraguas de Juntos y compartía su proyecto político. En el momento que lo deja de compartir, lo que tiene que hacer es dejar el acta de concejala para que lo ocupe una persona que crea. Es la obligación moral y ética.
El pacto antitransfuguismo dice que debe ser su partido quien debe declararlo tránsfuga.Cuando nos explicó que dejaría el grupo, le dije que sería muy cuidadoso en las declaraciones y no iría a hacer sangre. También le dije que, visto lo que ha pasado estos dos años, si no hubiera marchado ella, no habríamos puesto más pedazos y la habríamos hecho fuera del grupo. Ella ha dicho cosas que faltan a la verdad, como que yo he venido al Ayuntamiento a hacer carrera política. La carrera política ya la he hecho. De todas maneras, no seré yo quien pedirá que se la declare tránsfuga. Le exigí que deje el acta por dignidad.
Comenta que lo habrían expulsado. ¿Por qué?La Elvira Vidal lleva dos años cuestionando el liderazgo de Jordi Sendra y la acción política del grupo municipal. Quería entrar en el gobierno a costa de lo que fuera. Considero que en política hay una virtud que es condición sine qua non para ser un buen político: la lealtad. Elvira Vidal ha sido desleal al proyecto político y al liderazgo de Jordi Sendra.
“Si Elvira Vidal no hubiera marchado, lo habríamos hecho fuera del grupo por deslealtad al proyecto y a mi liderazgo”
¿Qué valoración hace del gobierno de Viñuales estos dos años?Teniendo en cuenta que están en minoría, veo un equipo que tiene muchas ganas de hacer cosas. Globalmente, hago una valoración positiva porque ha tenido capacidad de diálogo con los partidos para aprobar temas importantes. Tiene mérito haber aprobado el presupuesto de 2024 con 20 de 27 concejales.
El contrato de la basura continúa encallado judicialmente. ¿Se ha ido con prisas? ¿Se habría podido hacer algo diferente?La ciudad necesita estar limpia. El gobierno anterior, con Elvira Vidal como responsable de contratación, le quedó desierto el concurso de la limpieza. Entonces, entra el nuevo gobierno, cambia algunas cosas y se le presentan cuatro empresas. Se han seguido los procedimientos que tocaban. Vivimos en un estado proteccionista por los derechos y cualquiera tiene la potestad de recurrir contra cualquier decisión administrativa. Si en algún momento el Ayuntamiento hubiera decidido volver a la casilla de salida, tendríamos la ciudad sucia y volveríamos a estar exactamente igual. Los perdedores volverían a recurrir.
La cosa parece que se puede alargar...Confío mucho en lo que dicen los informes técnicos y jurídicos del Ayuntamiento. Había grupos que decían que se tenía que pedir un informe externo. Eso es deslegitimar a tus técnicos y a tu secretario general. Tenemos que esperar a que se resuelvan las cautelares antes del verano, firmar el contrato y que empiecen a limpiar. Siempre le he dicho al alcalde que triunfará o no en función de la limpieza y la seguridad.
“En el concurso de la limpieza y la basura se han seguido los procedimientos que tocaban”
¿La seguridad?Sí, nosotros hemos incidido mucho. Más cámaras, más drones, patrullas en la calle, colaboración con los Mossos, la comisaría mixta... No conseguiremos la delincuencia cero, pero se está mejorando.
Con relación a la seguridad, han puesto sobre la mesa la cuestión de la multirreincidencia. ¿Esta propuesta y otras como la del empadronamiento se toman por convicción o con los ojos puestos en Alianza Catalana? Son temas que interesan al ciudadano. Los agentes de la Guardia Urbana se desesperan cuando detienen a un hombre con historial de multirreincidencia y no pueden hacer nada. Entra en el juzgado por una puerta y sale por la otra. Hemos pedido que se cambie la ley para que esto se acabe. No tiene nada que ver con la inmigración. Hay gente que lo ha querido mezclar, como los comunes.
No lo hacemos por Alianza Catalana, sino por convicción. Igual que cuando pedimos tener las competencias de inmigración. Queremos hacerlo a la catalana. Cataluña evidentemente es un país de bienvenida, pero también es verdad que no cabe todo el mundo. Igual que hay derechos, tiene que haber deberes. Hay que cumplir las dos cosas.
La polémica con la gestión del apagón en Tarragona Ràdio se ha intensificado estos días. Han señalado ECP y PP... Comunes tira la piedra y esconde la mano. Nosotros dijimos que aquel apagón no se lo esperaba nadie y ningún medio de Tarragona tenía capacidad de emitir por problemas de falta de infraestructura. Tenemos que aprovechar lo que ha pasado para invertir en la radio. No es una cuestión de ser parte del Plaseqta, sino que, cuando pasa algo, el ciudadano enchufa Tarragona Ràdio. Los comunes y el PP han querido politizarlo.
“Los agentes de la Guardia Urbana se desestiman cuando detienen a un hombre con historial de multirreincidencia y no pueden hacer nada”
En Comú Podem afirma que no va contra del gerente y que Junts dice todo lo contrario de lo que hizo en el consejo de administración.En Comú Podem miente. Nuestros representantes en el consejo de administración manifestaron el apoyo total a los trabajadores y pedimos un estudio técnico para adecuar la radio. ECP fue uno de los principales instigadores en contra del gerente junto con PP y VOX. Nosotros decimos que no va de personal, sino de dotación técnica.
¿Pidieron que el gerente saliera de la reunión?Hubo un momento en que la situación se envolvió y se lo señaló. Como se hablaba de él, pedimos que abandonara la sala. En aquel momento, Jordi Collado (ECP), Maria Mercè Martorell (PP) y Javi Gómez (no adscrito) exigieron responsabilidades apuntando al gerente. Nuestra posición es que, si queremos hablar de asumir responsabilidades, es necesario un informe legal previo. Además, decimos que el consejo no lo tiene y nunca hemos pedido responsabilidades al gerente. Quien diga lo contrario miente. No permitiremos una persecución política encubierta.
La negociación del POUM es uno de los puntos calientes de esta segunda mitad del mandato. ¿Cuáles son sus prioridades? Hemos defendido siempre que es importante religar Poniente con el centro. Está previsto y nos parece bien el traslado de la Laboral. Por ejemplo, el señor Collado no está de acuerdo. ¿Quiere que los niños sigan yendo a estudiar a un lugar rodeado de químicas? Por otro lado, defendemos la estación intermodal en l'Horta Gran y también el derecho de la gente a escoger dónde quieren ir a vivir. Es decir, que puedan ir a vivir a Levante.
“La gente tiene que poder ir a vivir a Levante”
¿En qué ámbitos?Somos partidarios del PMU-34, que es el del Nàstic; la antigua Tierras Cavadas, que también mejorará la movilidad entre San Pedro y San Pablo y el centro; la budallereta, que es una parte del plan parcial inicial de La Budallera, y Mas d'en Sorder. La propiedad tiene un caserío de interés nacional que debe restaurarse y, para poder hacerlo, quiere construir una hilera de casas en una calle donde el otro lado de la acera está urbanizado por El Catllar. No está en medio del Anillo Verde, sino junto a casas de El Catllar. Si no se crea vivienda, el problema crecerá.
Izquierda y ECP se oponen. ¿Hay capacidad de tejer un consenso en Levante? Hemos tenido reuniones y hay que iniciar una negociación. El PSC defiende las cosas que nosotros defendemos. A los comunes no les gusta el traslado de la Laboral, tienen dudas con Mas d'en Sorder y l'Horta Gran. Mientras que en Esquerra, Xavi Puig se encapcha con aquellas cuatro casas de Mas d'en Sorder diciendo que no pueden ir.
Dice que se podría impugnar el POUM si se hace esta urbanización en Mas d'en Sorder.Es un encaparramiento del señor Xavier Puig. No es un planteamiento ideológico y de visión de ciudad de Esquerra.
"Mas d'en Sorder no está en medio del Anillo Verde, sino junto a casas de El Catllar"
¿La estación de Horta Gran rompe consensos del área metropolitana?Los consensos del área metropolitana van más allá del tema ferroviario, hay otros temas de movilidad. Lo hablé con el alcalde de Vila-seca y entendió mi posicionamiento. He de defender la estación porque no está pensada en contra de nadie, sino que favorece todo el territorio y Tarragona. Si no se hace así, de aquí a 15 años dejarán de pasar trenes por Tarragona. Que la intermodal de Vila-seca esté casi a punto no quiere decir que tengamos que renunciar a nuestro futuro. Tarragona no puede renunciar a tener unos accesos ferroviarios dignos. El grueso de pasajeros vienen de nuestra ciudad.
Desde 2011 el espacio de Junts-CiU no ocupa la primera o segunda posición. ¿Qué tiene que hacer para volver a ser una alternativa real en Tarragona? Juntos no es CiU, sino una amalgama de gente diversa. Pero es evidente que vengo de Convergència y estoy orgulloso de ello. Desde que llegó Joan Miquel Nadal hemos tenido muchos candidatos de cuatro años. Entiendo que para poder recoger lo que siembras tienes que poder optar a un segundo mandato. El partido ha sufrido cambios que han desorientado a la gente, pero ahora hay un proyecto que se llama Junts, un candidato que se llama Jordi Sendra y un trabajo que nos va a permitir multiplicar los concejales. Ahora bien, evidentemente tengo que pasar por las primarias todavía.