ERC ha vuelto a ser la fuerza más votada en la Diputación de Tarragona, con 74.762 votos, pero ha empatado con el PSC en número de escaños. Los republicanos y los socialistas han obtenido 9 diputados cada uno de los 27 escaños provinciales. De hecho, el PSC se ha llevado los 2 diputados que ha perdido ERC respecto a los comicios de 2019. Con esta aritmética y sin mayorías claras, las dos formaciones deberán negociar y buscar pactos para gobernar el ente provincial. Junts per Catalunya ha sido la tercera fuerza más votada, tendrá cuatro diputados, pero ha perdido la mitad de escaños. El PP vuelve a tener representación en la cámara supramunicipal con tres diputados provinciales, mientras que Vox entra por primera vez, con dos.
En 2019 las fuerzas independentistas se imponían con fuerza en la Diputación de Tarragona, gracias a los 11 escaños obtenidos por ERC y los 8 de Junts per Catalunya. La reusense Noemí Llauradó se convertía en la primera mujer en presidir el ente supramunicipal, después de que las dos formaciones llegaran a un acuerdo de gobierno, aunque entre las filas de Junts tampoco se descartaba un acuerdo con el PSC para mantener la presidencia.
Cuatro años después, el pacto entre Junts y PSC vuelve a ser una posibilidad, como también con los republicanos, que sin Junts quedarían sin alternativas, con los tres escaños de los populares y los dos de la extrema derecha.
Estos son los datos que han hecho oficial este lunes el Ministerio del Interior, aunque fuentes de la Diputación de Tarragona apuntan que los cálculos hechos con criterios de los partidos judiciales (Tarragona, Tortosa, Reus, Valls y Vendrell) darían otra aritmética. En concreto, ERC sería primera fuerza con 9 diputados, Junts obtendría 8, el PSC 8 más, y el PP y Vox tendrían uno cada uno. Estos resultados provisionales se confirmarán el miércoles.
