El acuerdo que han presentado esta misma mañana las empresas y trabajadores de la estiba del Puerto de Tarragona supondría un cambio radical en el conflicto laboral que se sufre desde hace un año y medio. Especialmente, la incorporación de 19 trabajadores de forma inmediata para trabajar en barco debería finalizar la crisis que afecta sobre todo al sector agroalimentario, conjuntamente con la complicada situación de sequía y la necesidad de importaciones de cereales.
El nuevo convenio, operativo hasta 2029, también prevé la preparación de la entrada de 21 personas más que actualmente se encuentran a la espera de finalizar su período de formación. Las dos partes se han comprometido a buscar las acciones necesarias para que la formación y homologación de este segundo grupo de trabajadores finalice en el menor tiempo posible.
Esta ampliación, en dos fases, supondrá el aumento de un 34% de la capacidad actual de operar. El presidente de la Autoridad Portuaria de Tarragona, Saül Garreta, ha expresado que este acuerdo "es futuro para el Puerto, las empresas, la APT y también para la cadena logística que cada vez es más larga y compleja". Seguidamente, ha recalcado que se trata solo del comienzo, pero que permitirá que "el funcionamiento de la estiba sea mucho más eficiente".
Ante el conflicto laboral que se sufre desde principios de 2022, Garreta ha valorado que una estiba poco eficiente provoca pérdida de oportunidades para el Puerto, los empresarios y los propios trabajadores. Por este motivo, después de que algunos barcos se hayan desviado a otras zonas portuarias en los últimos meses, han propiciado finalmente este acuerdo que, según asegura Pablo García, en representación de la Asociación de Empresas Estibadoras, "era indispensable para poder emprender otras acciones".
Por parte de las empresas estibadoras, Xavier Tárraga ha agradecido la estabilidad que garantizará este acuerdo hasta 2029 y que evitará la disolución del Centro Portuario de Empleo (CPE), como se había planteado hace un año. Además, ha recordado que ha sido un período largo de negociaciones, pero que finalmente todas las empresas -a excepción de una que cesará su actividad- han llegado al entendimiento. Sin embargo, las garantías laborales van más allá de las demandas del sector y, según Tárraga, dispondrán de más recursos, apostarán por nuevas tecnologías, más formación, etc.

Implicaciones para el sector agroalimentario
En esta línea, el acuerdo firmado pondría solución a la falta de personal disponible para determinados sectores, como el agroalimentario -uno de los más perjudicados-, ya que además del aumento de plantilla, se contempla la asignación de un número fijo de estibadores por empresa estibadora, lo cual permitirá una mayor garantía de servicio a los clientes.
García ha afirmado que "habrá personal asignado diariamente a las empresas para que puedan tener garantizado su servicio". Una mayor eficiencia de los procesos internos de asignación y una rotación garantizada en todos los sectores deberían satisfacer las demandas de las empresas y, por lo tanto, incrementar los ritmos de descarga.
También, los objetivos acordados prevén seguir formando a más personal e, incluso, la incorporación progresiva de trabajadores externos a la estiba del Puerto de Tarragona. En este primer proceso se incorporarían una cuarentena que ayudarán a acelerar la descarga y desencallar, por lo tanto, el conflicto de la estiba. "El objetivo es seguir incrementando la plantilla en los próximos 6 años porque eso significará que están respondiendo a las demandas de los clientes y el tráfico en el Puerto de Tarragona aumentará", ha concluido Xavier Tárraga.
Aumento de importaciones
Con todo, una de las principales preocupaciones del sector agroalimentario, por el cual alertaban de posibles problemas de abastecimiento en septiembre de no firmarse ningún acuerdo, era el aumento en la llegada de barcos para cubrir con importaciones las necesidades de la población. El presidente de la APT ha explicado que incrementar el rendimiento en un 35% "permitirá contar con más herramientas para hacer frente a los picos de tráfico que periódicamente se producen en el Puerto de Tarragona, especialmente en la importación de cereales".
Aun así, ha señalado que "el Puerto tiene una capacidad limitada" para asumir un tráfico cada vez mayor de barcos, a consecuencia de la sequía, que reduce a mínimos la producción nacional, y la guerra en Ucrania, que altera el flujo normal del comercio. Saül Garreta ha añadido, también, que "en Tarragona entra más de un 40% de los cereales de la península" y, en global, ha reivindicado que otros eslabones de la cadena logística deberían replantear sus previsiones y su organización para que se puedan "absorber las necesidades".
El año pasado, el Puerto de Tarragona batió el récord histórico de tráfico de cereales con 5,95 millones de toneladas y, este año, según diversos agentes de la cadena logística se prevé que se supere esta cifra, dado que la cosecha de cereal en el Estado español se estima que solo alcanzará 9 millones de toneladas cuando, en un año normal, suele ser de 25 millones de toneladas. Por lo tanto, este acuerdo sienta las bases para poder afrontar con más garantías esta situación no habitual en el puerto tarraconense.

La APT, posición de mediación
Desde la Autoridad Portuaria de Tarragona han reivindicado su carácter de mediación, asegurando que no tiene competencias para intervenir directamente en la organización del trabajo o la formación en el sector de la estiba. Es más, Garreta ha expuesto su posicionamiento neutral desde el cual han posibilitado un clima de diálogo y favorecido el entendimiento entre ambas partes, con el objetivo de garantizar la competitividad del Puerto.
Estos últimos meses, la APT ha priorizado la continuidad y regularidad del servicio portuario de manipulación de mercancías en todas las operaciones de los barcos atracados, velando por el correcto funcionamiento de las instalaciones y la prestación más eficiente posible. También, el presidente del Puerto de Tarragona afirma que han emplazado a las administraciones competentes para encontrar una solución.
Al mismo tiempo, Saül Garreta ha destacado "la necesidad de sumar esfuerzos para lograr una operativa portuaria que asegure el suministro a las cadenas logísticas de agroalimentarios, vehículos, fruta tropical y contenedores". Asimismo, ha agradecido el esfuerzo de ambas partes para llegar al acuerdo firmado, después de más de un año de negociaciones, que permitirá mejorar la eficiencia del servicio que se ofrece desde el Puerto al resto del país.