Elia Canales vuelve de los Juegos Olímpicos con un diploma olímpico bajo el brazo.Ya es una de las arqueras más establecidas en el mundo con solo 23 años.Actualmente, figura como número 5 del mundo en los rankings y es el presente y el futuro del deporte.
Hemos tenido la oportunidad de hablar con ella después de los Juegos Olímpicos, ahora ya aquí, en casa.Canales asegura que no hay nada comparable como el escenario que había en París y que ha tenido la suerte de vivirlo y de disfrutarlo.
La del Club de Tiro con arco de Constantino vuelve con diploma olímpico al mixto
En cuanto al rendimiento deportivo, cree firmemente que donde más posibilidades tenían era en el mixto y no en el individual.El deportista transmite toda la confianza del mundo que tiene depositada cada vez que va a una competición con Pablo Acha y que, la experiencia en la competición individual le sirvió para poder dar un paso más al mixto.
En lo individual quedó eliminada por la británica Megan Havers a trigésimo segundos de final.En la modalidad mixta con Pablo Acha, cayeron eliminados en cuartos de final -consiguiendo el diploma- debido a una excelente actuación del indio Bommadevara.
Una mentalidad única: "prefiero una medalla al mixto que a lo individual, por qué la puedo compartir"
La tiradora muestra una mentalidad digna de una de las mejores atletas del mundo ante los resultados y de las competiciones."Una mala actuación no podía hacer que yo no disfrutara de mis primeros Juegos Olímpicos", afirma Elia Canales.Y es que cree que los resultados de una única competición no la validan como deportista profesional, porque cree en su calidad.
El espíritu en equipo, por ser un deporte tan individual, lo tiene muy trabajado; también el apartado mental de la competición, asegurando que siempre tenía un "diálogo interno positivo".
"El Club de Tiro con Arco de Constantino es muy familiar y siempre me dan todo el apoyo del mundo"
Elia Canales tuvo que marcharse a Madrid para desarrollar su carrera deportiva.Tiene la idea de quedarse allí un tiempo -nos comenta que ahora abandonará el CAR para mudarse un piso- y de continuar con el grupo de entrenamiento que tiene actualmente, pero siempre tiene un espacio y un lugar para el Club de Tiro con Arco de Constantino, al igual que la entidad por ella. "Siempre me dan lo que necesito cuando vengo. Los siento muy cerca cuando tengo que venir, es un club muy familiar y siempre me lo sentiré un poco mío".
Aparte de echar en falta a su familia cuando no está aquí, la playa, la tranquilidad y sus amigos siempre son "volver a casa" y valora mucho la calma que tiene Tarragona.
