El proyecto Inspira STEAM llega a más de 800 niños en su tercer año en Tarragona

11 de febrero de 2021 a las 11:43h

Técnica de cámara, científica, ingeniera, veterinaria, alcaldesa, informática… son algunas de las profesiones que niñas y niños de sexto de primaria de la Escuela Prácticas de Tarragona explican que quieren ser de mayores, a la vez que imaginan cómo será su perfil de Instagram de aquí a 30 años.

Esta práctica forma parte de una de las actividades que se incluyen en el proyecto Inspira STEAM, que por tercer año consecutivo se lleva a cabo en Tarragona y en el que participan más de 800 alumnos de 13 escuelas de la demarcación durante este curso. La iniciativa está coordinada y organizada por la URV, que han visto la necesidad de fomentar actividades que ayuden a romper estereotipos de género y que normalicen la presencia femenina en los estudios STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas).

Las responsables de esta tarea son las 65 mentoras, la gran mayoría mujeres, que trabajan en el sector científico y tecnológico del territorio y que, de forma desinteresada, aportan su granito de arena a hacer visible la figura femenina en los ámbitos de la ciencia, la investigación y la tecnología, fuertemente masculinizados.

"El proyecto Inspira STEAM nació en 2016 en la Universidad de Deusto y este es el tercer año que lo hacemos en Tarragona, coordinado, liderado y organizado por la URV, con el objetivo de eliminar la idea de que las profesiones tecnológicas deben estar asociadas al género masculino", explica Cristina Urbina, profesora de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de la URV y coordinadora del proyecto. Se estima que el número de estudiantes que optan por una formación tecnológica decrece cada año, sobre todo entre el colectivo femenino. Aunque el 54,3% del total de estudiantes del sistema universitario español son mujeres, su presencia en las titulaciones técnicas como Ingeniería y Arquitectura decae al 26,4% (en Tarragona solo un 18% de los alumnos hace carreras de ingeniería, y de este 18%, solo un 20% son mujeres).

El corazón del proyecto Inspira son las mentoras que, de manera voluntaria, acercan su día a día a chicas y chicos a través de las seis sesiones de trabajo que se hacen a lo largo del curso en horario lectivo. Marta Sales es una de las mentoras que participa en el proyecto de la Escuela Prácticas de Tarragona. "Como mujer investigadora es muy gratificante poder transmitir cómo soy en un contexto científico y ayudar así a que vean que las mujeres pueden hacer este trabajo y lo pueden hacer bien".

Durante unas horas aparca la docencia y la investigación que hace en el Departamento de Ingeniería Química de la URV para dedicarse a esta iniciativa, que ayuda a las niñas y los niños a tener más información sobre el mundo de la ciencia y la tecnología y también contribuye a generar debate. "Les hacemos reflexionar para que vean que los trabajos no tienen género y la información que les aportamos les ayuda a ver y reconocer cuál es la situación de desigualdad para que aprendan a que esto no se produzca", señala.

Estas sesiones -añade- también les ayudan a entender "el papel tan importante que tienen la ciencia y la tecnología en muchos de los trabajos que ahora les gustan y es una manera de que aprendan a valorar estas disciplinas", afirma la investigadora.

A nivel del Estado español, hay casi 9.000 niñas y niños implicados en el proyecto, además de 177 escuelas y cerca de 600 mentoras trabajando de manera altruista en esta iniciativa. Inspira STEAM es un proyecto promovido por la Universidad de Deusto, que cuenta con la colaboración de Innobasque en Euskadi; la Universidad Rovira i Virgili, Dow, Basf, Dupont y Elyx Polymers en Tarragona; Edenway en Barcelona; CIOnet en Madrid, la UCA y la Universidad de Jaén en Andalucía; la Universidad de Vigo y la de A Coruña en Galicia; la Universidad de Oviedo en Asturias; la UCAM en Murcia y la financiación de las tres diputaciones forales: Bizkaia, Gipuzkoa y Álava, además del Ayuntamiento de San Sebastián, Roche, Barcelona Activa, Silk, HP Foundation, BBK y la Generalitat de Catalunya.