Durante estos últimos meses, un total de 49 establecimientos de Vila-seca, Valls, Constantí, Calafell y Tarragona han renovado su adhesión al programa del Voluntariado por la Lengua. De esta manera, reafirman su compromiso durante dos años para colaborar con el CPNL para que los alumnos de los cursos de catalán y las parejas lingüísticas del Voluntariado por la Lengua puedan practicar el catalán en un contexto real.
Concretamente, estos establecimientos se comprometen a atender a los aprendices en catalán, aunque lo hablen con dificultad, y así favorecer su aprendizaje. Este es un proyecto transversal del CPNL, dado que se pretende incidir sobre buenos usos en el mundo del comercio, favorecer el conocimiento del entorno, acercar el comercio local a los aprendices de catalán y facilitar que el alumno practique lo que aprende en el aula en contextos reales.
La realización de prácticas lingüísticas en los establecimientos forma parte de la programación de los cursos de nivel básico 3 y son optativas en otros cursos y la valoración que se hace es muy positiva, tanto por parte de los aprendices como por parte de los establecimientos. Estos, especialmente, agradecen el fomento que se hace del comercio de proximidad entre los alumnos, que, normalmente, son recién llegados al pueblo.
En estos momentos, en el territorio del CNL de Tarragona (comarcas del Tarragonès, Baix Penedès, Alt Camp y Conca de Barberà), en total hay 129 establecimientos comprometidos con la enseñanza de catalán, que se pueden identificar por la presencia de una pegatina. La lista se puede ir ampliando si hay otros establecimientos que se quieran añadir.