Coincidiendo con la llegada del verano, el Ayuntamiento de El Catllar ha activado el dispositivo de seguridad más grande desplegado hasta ahora en el municipio. Este plan incluye la ampliación sin precedentes del servicio de vigilancia municipal, tanto en recursos humanos como materiales, la incorporación de un guarda rural durante más de dos meses, y se suma la reciente instalación de 21 cámaras lectoras de matrículas en los principales accesos a las urbanizaciones. Este conjunto de medidas suponen el despliegue más ambicioso de los últimos años en materia de seguridad en el municipio, y reflejan el compromiso del gobierno municipal con la protección y la tranquilidad de los vecinos y vecinas de El Catllar.
El alcalde de El Catllar, Xavier Canadell, destaca que "este refuerzo histórico en seguridad es una respuesta clara a la necesidad de garantizar la tranquilidad de todos los vecinos y vecinas. Hemos hecho una apuesta decidida por doblar la plantilla de vigilantes municipales y por dotarlos de los medios más avanzados, para que la seguridad sea una prioridad real y visible en El Catllar."
A su vez, Jordi Ruiz, concejal de Seguridad y Protección Civil, añade que “con la incorporación del turno de noche y la coordinación constante con los Mossos d’Esquadra, podemos actuar de manera más eficaz y preventiva. La apuesta estratégica por el nuevo sistema de lectores de matrículas y los vehículos renovados son herramientas clave que nos permiten proteger mejor nuestro municipio, especialmente en las horas y zonas con más incidencia delictiva."
Más del doble de vigilantes municipales
En los últimos meses, el número de vigilantes se ha más que doblado, pasando de 4 a 9 efectivos, y se han incorporado nuevos turnos, extienden el servicio a la franja nocturna, hasta ahora inexistente. Esta reorganización permite intensificar la presencia de efectivos en las franjas horarias con más incidencia de delitos, especialmente robos con fuerza. Gracias a la coordinación constante con los Mossos d’Esquadra y al análisis de datos reales, se han identificado los momentos de mayor riesgo, y se han destinado tres equipos específicos a cubrir estas horas clave, mejorando la capacidad de respuesta y prevención.
Inversión en un sistema de detección de matrículas
También se ha hecho una inversión estratégica en medios materiales, con la adquisición de nuevos vehículos mejor equipados para las patrullas municipales, y la reciente inversión, superior a los 400.000 euros, para instalar un total de 21 lectores de matrículas en el municipio. Estos dispositivos, conectados directamente con el sistema de los Mossos d’Esquadra, permiten ampliar la vigilancia y mejorar la capacidad de respuesta policial en todo el término municipal, refuerzan el control de accesos y la detección de vehículos sospechosos, contribuyendo a una mayor seguridad vial y ciudadana.
En verano, se incorpora la figura de guarda forestal
Además, por tercer verano consecutivo, a partir del próximo 1 de agosto y hasta el 16 de octubre el Ayuntamiento incorpora un guarda rural. Este agente tendrá como principales funciones la vigilancia de vertidos incívicos, la prevención de incendios forestales y la protección contra hurtos a los agricultores, reforzando así la seguridad y el respeto por el entorno natural durante la temporada de verano. Este guarda estará operativo los siete días de la semana y se coordinará con los Guardias Municipales y los Mossos d’Esquadra.