Son cuatro las familias que sufren las consecuencias de las inundaciones del 23 del pasado mes de septiembre en El Catllar.
Las familias han denunciado que las inundaciones se provocaron por la obra de una nueva carretera, de la cual se hace cargo la Diputación. Las obras tapaban la salida de la riera y, debido a esto, se creó un embalse de hasta 5 metros y el agua entró en las viviendas.
Un mes después estas familias continúan igual. No han recibido ninguna ayuda ni del Ayuntamiento de El Catllar ni de la Diputación. La Diputación ha respondido a las familias y a estas alturas se encuentra realizando un informe para valorar su responsabilidad. Los testimonios aseguran que la Diputación el día de las inundaciones retiró la arena que atascaba la riera, dándose cuenta de la gravedad del asunto.
Los afectados manifiestan que se han tenido que hacer cargo de alquilar una nueva vivienda mientras además, tienen los gastos de tratar de solucionar esto con abogados, arquitectos y asesores. La sensación de estas personas es de impotencia e indefensión.
Una situación que deja tanto a grandes como a pequeños en una condición de inestabilidad e incertidumbre.