Dos estudiantes del grado en Ingeniería Informática de la URV, Sergi Sigró Barruz y Arnau Pelejà Pi, han diseñado y desarrollado unas aplicaciones móviles para el seguimiento y conservación de dos especies del territorio en peligro de extinción: la tortuga boba y el chorlitejo patinegro.
Las aplicaciones ofrecerán a la ciudadanía y a los voluntarios del grupo ecologista GEPEC las herramientas necesarias para el seguimiento y gestión de las especies. Entre otros, hacer turnos en la custodia de los nidos de la tortuga boba y registrar observaciones y localizaciones del chorlitejo patinegro.
Ambas aplicaciones son el resultado de sus Trabajos de Fin de Grado, que se han enmarcado en el Programa de Aprendizaje Servicio (APS) que ofrece la URV, pionera en esta metodología. Se trata de una propuesta educativa que combina procesos de aprendizaje y servicio a la comunidad, de modo que los estudiantes se forman dando respuesta a necesidades de una entidad del territorio, como es el GEPEC.
Vigilancia de la tortuga boba
Sergi Sigró Barruz, autor del trabajo “Desarrollo de una aplicación móvil para la gestión de voluntariado tortuga en el litoral catalán”, ha explicado cómo su experiencia previa con voluntariados de tortugas y el interés por hacer un trabajo que tuviera un impacto social y medioambiental le motivó a realizar este proyecto APS con el GEPEC. Sigró ha centrado su trabajo en el desarrollo de una aplicación móvil para la conservación y vigilancia de la tortuga boba en las playas de Cataluña, que proporciona información relevante, facilita la protección de los nidos a través de turnos y ofrece una herramienta de gestión para los miembros del GEPEC.
El ingeniero informático de la Escuela Técnica Superior de Ingeniera (ETSE) ha valorado la experiencia como única y gratificante, y está convencido de que su aplicación será de gran utilidad: “La aplicación aún tiene mucho potencial y, junto con el GEPEC, se conseguirá crear una App muy potente”, ha afirmado.
Gestión de datos sobre los nidos del chorlitejo patinegro
Arnau Pelejà Pi durante la presentación del trabajo “Diseño de una aplicación móvil de ciencia ciudadana para la observación del chorlitejo patinegro”.
Por su parte, Arnau Pelejà Pi ha explicado que la necesidad del GEPEC por crear un medio más eficaz para compartir datos sobre los nidos del chorlitejo patinegro le motivó a centrar su trabajo en una aplicación móvil que simplifique este proceso, que hasta el momento tenía lugar por grupos de WhatsApp.
En este sentido, su proyecto, “Diseño de una aplicación móvil de ciencia ciudadana para la observación del chorlitejo patinegro”, se centra en el diseño de una App con una interfaz intuitiva y opciones previamente definidas que permiten a los voluntarios crear observaciones de manera más rápida y sencilla. Adicionalmente, “permite a los técnicos descargar los datos en formato Excel o verlos en un mapa para su posterior tratamiento y análisis”, ha explicado el autor.
Aunque la primera versión aún no está disponible para todo el mundo, ha contado con las propuestas de voluntarios para mejorar algunas opciones.
Pelejà ha valorado como “enriquecedora” la experiencia, tanto en el ámbito académico por los conocimientos adquiridos, como por el impacto social que conlleva: “La experiencia me ha permitido ver de primera mano el proceso de creación de una aplicación móvil y, junto con esto, cooperar con el GEPEC ha sido gratificante”, ha explicado.
Xavier Jiménez Llobera, presidente del GEPEC, ha valorado positivamente la colaboración generada entre la universidad, y el Grado en Ingeniería Informática, y una entidad de conservación como el GEPEC para crear herramientas para seguir trabajando en la conservación de la biodiversidad. “Es destacable que un grado como el de Ingeniería Informática, que en principio no se relacionaría con la conservación, acabe implicándose generando estas herramientas tan necesarias”, ha explicado.
Jiménez ha considerado importante esta implicación para seguir trabajando intensamente para que no desaparezcan estas dos especies en grave peligro de extinción, como son la tortuga boba y el chorlitejo patinegro. “Es una implicación que pienso que se debe prorrogar en el tiempo, con otras colaboraciones, pero que iniciamos con muy buen pie”, ha concluido.
Estudiantes, miembros del GEPEC y profesorado implicado en la elaboración de las aplicaciones.De hecho, la sostenibilidad es un objetivo del mismo GEPEC y de las titulaciones de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de la URV, que a través del programa de APS puede encontrar una aplicación directa.
Los proyectos se dieron a conocer en un acto de retorno entre la ETSE y la entidad ecologista. Intervinieron Xavier Jiménez Llobera, presidente del GEPEC; Àngel Cid Pastor, director de la ETSE; Avril Lombardi, técnica del programa APS, y Pere Millán y Montse García, tutores académicos de los trabajos.
