Cambrils se ha despertado este miércoles con multitud de desperfectos provocados por los fuertes aguaceros que cayeron esta noche del martes en Cataluña y que en la localidad cambrilense han afectado especialmente a las rieras y los barrancos que atraviesan el municipio. Ya a plena luz del día, la alcaldesa, Camí Mendoza, y el concejal de Servicios y Protección Ciudadana, Lluís Abella, han hecho un recorrido por el municipio para inspeccionar los desperfectos de primera mano.
"Es una afectación importante. Aún no hemos valorado los daños y tenemos que terminar de visitar todos los puntos afectados, pero lo que podemos decir es que se ha centralizado en la riera de Alforja, que estuvo a punto de desbordarse", ha explicado la alcaldesa. En este punto se ha derrumbado la pasarela para peatones ubicada frente a la comisaría de los Mossos d'Esquadra, donde también ha cedido buena parte de los muros del cauce de la riera.
El resto de rieras que cruzan el municipio también se han visto gravemente afectadas en sus tramos finales, especialmente el barranco de la Mare de Déu del Camí, donde el temporal se ha llevado parte de la acera, barandillas, algunos faroles y en general toda la zona ajardinada. La intensa lluvia también ha afectado a las playas, que han aparecido llenas de la suciedad arrastrada por el temporal. En el caso de la playa de la Riera de Alforja ha quedado engullida por el agua.
Por otra parte, se ha inundado la planta baja del edificio Cambrils Diagonal (al final de la riera de Riudoms), se ha derrumbado una parte del muro del recinto del Parque Samà, ha habido un deslizamiento lateral en la A-7, a la altura de la cooperativa de Cambrils y ha quedado interrumpida la circulación de trenes. "Este temporal nos ha recordado al de 1994, pero afortunadamente esta vez no se han tenido que lamentar víctimas personales", ha dicho Camí Mendoza.
Cabe destacar que un total de 139 personas de Cambrils llamaron al teléfono de emergencias 112 por diversas afectaciones. El temporal dejó sin luz a cerca de 5.000 personas durante la noche. Además, un grupo de 64 escolares, profesores y monitores de Sant Just Desvern que se encontraban alojados en la casa de colonias Marinada tuvo que ser evacuado y ha pasado la noche en el pabellón municipal, antes de volver esta mañana hacia su casa.