La Iglesia de Sant Martí y la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Altafulla han presentado esta mañana la finalización de los trabajos de restauración del muro del antiguo cementerio ubicado en el entorno de la parroquia. El acto ha contado con la presencia del co-alcalde de Altafulla, Jordi Molinera; el Cura Párroco de Sant Martí, Jaume Gené; la concejala de Cultura, Gemma Maymó, y el Maestro de Obra, Enric Barceló.
Como ha explicado la concejala de Cultura, Gemma Maymó, la tempestad del Glòria, que se produjo entre los días 20 y 23 de enero del año pasado, provocó el desprendimiento de 160 metros cúbicos del muro perimetral que rodea el conjunto arquitectónico de la Iglesia de Sant Martí, y que comportó el cierre del camino público que rodea la parroquia y el Castillo. En este proceso se localizaron restos óseos humanos que podrían datarse del siglo XVIII y que corresponderían al antiguo cementerio de la villa.
Los trabajos han consistido, según ha detallado el Maestro de Obra, Enric Barceló, en la restauración del muro basándose en la estructura original y utilizando piedras de margen de la zona y mortero de cal respetando así los criterios del conjunto de la Vila Closa, declarada Bien Cultural de Interés Nacional desde 1998. También se han recuperado los restos humanos que han vuelto a su lugar original.
En este sentido, el Cura Párroco de Altafulla, Jaume Gené, ha remarcado la relevancia del espacio "como elemento patrimonial de la villa" y zona compartida con el municipio de acuerdo con el convenio de colaboración existente entre la Parroquia de Sant Martí y el Ayuntamiento de Altafulla para su uso.
La inversión ha sido de 80.000 euros financiados por la Iglesia de Sant Martí y la colaboración del consistorio en la aceleración para la ejecución de los trabajos.