Agentes de la Policía de la Generalitat- Mossos d'Esquadra de la División de Investigación Criminal (DIC), conjuntamente con agentes de La Guardia Civil y con la colaboración de vigilantes municipales de Riudoms, han detenido a un hombre, de 23 años y nacionalidad serbia, como presunto autor de los de un delito contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico.
La investigación se inició a principios de 2020 cuando un agricultor de la localidad de Riudoms puso en conocimiento de la Guardia Civil los problemas técnicos que estaba sufriendo en su finca en relación con la fluctuación de energía eléctrica. Con la ayuda de medios técnicos de la Unidad y con el asesoramiento de personal de la empresa suministradora de energía eléctrica se llegó a la conclusión de que en alguna finca cercana se podría estar cometiendo algún tipo de ilícito penal relacionado con el consumo desmesurado de energía eléctrica, iniciándose una búsqueda encaminada al esclarecimiento de los hechos.
Durante el mes de marzo, se detectó una coincidencia en esta búsqueda con otra que venía desarrollando el grupo de investigación criminal del cuerpo de los Mossos d'Esquadra que investigaba una organización criminal dedicada al cultivo, elaboración y tráfico de marihuana a escala internacional.
Al coincidir unos de los objetivos se acordó continuar las investigaciones de manera conjunta con el apoyo de vigilantes municipales de Riudoms. Así las primeras investigaciones permitieron descubrir una finca agrícola aislada en el término municipal de Riudoms y en ella la existencia de elementos destinados al cultivo interior de marihuana, como depósitos de agua, equipos de aire acondicionado y extractores de aire, de los cuales se desprendía un fuerte olor característico a marihuana.
Esta finca se había ocupado ilegalmente a mediados de 2019 por parte de un hombre, el cual no tenía residencia legal y podría ser el responsable de la actividad ilegal que se estaría llevando a cabo en la finca.
Así, durante la mañana del jueves se estableció un dispositivo policial conjunto de Mossos d'Esquadra y Guardia Civil, con la colaboración de vigilantes municipales, que permitió desmantelar la plantación de marihuana e intervenir 915 plantas, así como diferente material y efectos que formaban parte de un complejo y sofisticado sistema de elaboración y cultivo de marihuana, como equipos de aire acondicionado, extractores, filtros, focos y transformadores.
En el interior del perímetro de la finca existía una construcción de una sola planta que se encontraba acondicionada para albergar plantaciones clandestinas. Además, su interior se había compartimentado en diferentes estancias para albergar las diferentes zonas. Así se encontraban la zona de residencia y vigilancia de los cuidadores, la zona de cultivo y la de elaboración.
En la zona de cultivo se localizó una sofisticada instalación con diferentes estancias para acoger las plantaciones en sus diferentes fases de crecimiento con el objetivo de aumentar el rendimiento del cultivo.