Altafulla (Tarragonès) ha empezado a mover arena de la playa de La Paella para reforzar la parte central, frente a la zona de Les Botigues de Mar. Lo hace con la arena acumulada en los reservorios dunares de Voramar y en la zona del Club Marítimo, ante la negativa del Ayuntamiento torredembarra del trasvase de arena. En total, se moverán unos 700 metros cúbicos, menos de la mitad de lo que se había previsto con la arena del municipio torreño. La coalcaldesa de Altafulla, Alba Muntadas, ha dicho que es una aportación para hacer un mantenimiento "mínimo" del litoral y ha cargado contra la decisión de Torredembarra de llevar el proyecto a la Fiscalía. Considera que la posible afectación al sendero camanegro es una "excusa" y que quieren "alargar los plazos".
La problemática sobre la falta de arena en la playa de La Paella d'Altafulla y la sustracción de arena del puerto de Torredembarra ha enfrentado a los dos municipios. La actuación debía realizarse a inicios de junio, tenía la autorización de la Dirección General de Políticas de Montaña y del Litoral y el informe favorable del servicio provincial de Costas, pero el gobierno torreño llevó la propuesta a la Fiscalía de Medio Ambiente. Según Torredembarra, el proyecto podía afectar a la nidificación del chorlitejo camanegro, una especie protegida.
Tras reunirse los dos implicados, Altafulla ha decidido reforzar la playa sólo con la arena de los reservorios dunares y del Club Marítimo de la misma población. Desde este martes por la mañana, maquinaria pesada está extrayendo de ella para depositarla en la parte central, el espacio que más se erosiona cada año. Los trabajos se prolongarán hasta el miércoles y la coalcaldesa asegura que se trata de un "mantenimiento de mínimos". Se verterán 700 metros cúbicos de arena, pero "harían falta unos cuantos más", dice Muntadas.
La previsión inicial era coger entre 1.500 y 2.000 metros cúbicos del puerto de Torredembarra, pero la denuncia en Fiscalía ha paralizado la extracción como mínimo seis meses. Muntadas ha acusado al Ayuntamiento de Torredembarra de "jugar con los plazos", queriendo "alargar" el proceso. El equipo de gobierno torreño no ha querido hacer declaraciones.
La coalcaldesa ha advertido de que en ningún caso renuncian de la arena del pueblo vecino y ha manifestado que cuando acabe la prórroga y tengan el permiso correspondiente de un año, harán la extracción cuando lo "necesiten".
"La excusa" del chorlitejo camanegro
En la denuncia en Fiscalía, Torredembarra alegaba que cerca hay una zona de nidificación del chorlitejo camanegro que había que preservar. Muntadas cree que es una "excusa" porque la maquinaria pasaría a 200 metros del espacio protegido. Además, ha añadido que por ese trago "cada día pasa una limpieza mecánica con tractor, pasando a escasos metros de este nido". También ha recordado que allí hay un guingueta.
Unas semanas atrás y a través de un comunicado, el Ayuntamiento de Torredembarra mostraba su malestar por los "efectos negativos" que tuvo la extracción de arena el año pasado, cuando se cogieron 14.000 metros cúbicos. Explicaban que se ha generado una depresión de 13.000 metros cuadrados en la playa, que se llena de agua cada vez que llueve o hay temporal de mar e impide usar instalaciones como pasarelas, puntos de salvamento o chiringuitos.
Muntadas ha dicho que este año "no se iba a excavar, sino a raspar" y que la cantidad era mucho menor. "El año pasado se sacaron muchos más metros que no estuvieron aquí, sino que fueron principalmente a la playa Llarga", en Tarragona, ha apuntado.
Regresión del litoral
La coalcaldesa ha afirmado que el refuerzo de la playa con arena de los reservorios dunares es gracias a la gestión del litoral "basada en la naturaleza" que ha hecho el actual equipo de gobierno. "Estamos en un contexto de cambio climáticoy de regresión del litoral", ha aseverado. Por ello, ha reclamado una "estrategia global" desde el servicio de Costas del Estado y del Departamento de Territorio. Cree que así "se evitarían conflictos" como el actual.
La altafullense también ha aprovechado para reclamar al Estado que saque a licitación el estudio para encontrar una solución para mitigar la regresión de la playa. La UPC ya hizo un informe con imágenes de satélite, y desde Costas afirmaron que tenían suficiente y que próximamente publicarían la licitación. Paralelamente, la universidad continúa haciendo barimetrías y prevén que el próximo año tengan listo el informe final.