Vuelve el sofá del alcalde, a partir del 16 de septiembre en Calafell

Ramon Ferré recupera la atención directa a la ciudadanía, con un formato aún más “de tú a tú”

08 de septiembre de 2025 a las 19:56h

El sofá del alcalde de Calafell, Ramon Ferré, vuelve a partir del 16 de septiembre. Como siempre, en la calle, en lugares y horas de gran concurrencia para facilitar el acceso, pero con novedades: un formato aún más cercano y de “tú a tú”.

“Para empezar, al sofá que usábamos le damos un merecido descanso, después de que hayan pasado cerca de 2.000 personas”, dice Ferré. “Ahora, me sentaré con los ciudadanos en un banco de la calle, la sala de espera de una oficina municipal o el famoso ‘muret’ del Paseo Marítimo”, añade.

El alcalde explica: “No habrá otra ‘parafernalia’ que un letrero para que se pueda ver qué estamos haciendo. No tendremos micros ni altavoces, para que las personas que se acerquen puedan hablar con confianza, o discreción si es necesario”. Y remacha: “Al final, se trata de resolver problemas de la gente, no hacerlos de público dominio”.

Se han programado siete sesiones de aquí a final de año:

  • Martes 16 de septiembre. De 10 a 12 horas. En el Mercado Municipal.
  • Viernes 19 de septiembre. De 10 a 12 horas. En el mercado semanal de Segur, en la entrada del Puerto.
  • Martes 7 de octubre. De 10 a 12 horas. Delante del CAP de Calafell.
  • Viernes 10 de octubre. De 10 a 12 horas. Plaza Mediterrani de Segur.
  • Martes 4 de noviembre. De 10 a 12 horas. Plaza del Manila.
  • Viernes 14 de noviembre. De 10 a 12 horas. En el Servicio de atención al ciudadano de Segur (calle Joan Maragall 32).
  • Martes 2 de diciembre. De 10 a 12 horas. En el Servicio de atención al ciudadano de la Playa (calle Sant Pere 29).

Proximidad y eficacia

Ramon Ferré recuerda “Meses atrás, ensayamos un nuevo formato, el Despacho en la Calle. Fue bien, porque continuamos atendiendo a muchas personas, contestando preguntas y resolviendo problemas. Pero que hubiera una mesa entre los participantes y yo mismo, daba un punto de frialdad y todo era menos ágil”. Y destaca: “Volvemos al sofá, y de forma más simplificada, para recuperar la frescura y el dinamismo originales”.

El alcalde ha recordado la eficacia del sofá, que estrenó en su campaña electoral de 2015 y que después funcionó “oficialmente”. Según Ferré, “en dos horas, puedo atender tranquilamente a más de 20 personas. Si tienen que pedir hora para verme en el Ayuntamiento, tendrían que esperar bastante”.

El 70% de las demandas que los ciudadanos hacen cuando se sientan en el sofá se solucionan rápidamente. El resto, a partes aproximadamente iguales, son cuestiones que tienen solución a medio plazo porque requieren un trámite administrativo largo, y temas de difícil ejecución, bien por no ser de competencia del Ayuntamiento, bien por ser temas de difícil encaje por no existir consensos a su alrededor.

Ferré concluye: “La gracia de este formato no es tanto la facilidad para contactar directamente con el alcalde, como el seguimiento que se hace después de los temas planteados en los encuentros”. Por lo tanto, añade, “el sofá no es una actividad de cara a la galería, sino una fórmula muy válida para agilizar las cosas”.