La Fundación Sant Antoni Abat ha presentado su Espacio Multisensorial en las sextas Jornadas de la Asociación Española de Estimulación Sensorial y Snoezelen, que han tenido lugar en Madrid los días 23 y 24 de noviembre. El Espacio Multisensorial es uno de los servicios que ofrece la Fundación Sant Antoni Abat en el ámbito de actuación de la salud y la investigación. Se trata de un espacio situado en el interior del Hospital de Sant Antoni en el que pacientes afectados por Parkinson y Alzheimer, los primeros colectivos que han pasado por este servicio, reciben estimulación multisensorial con el objetivo de reducir la sintomatología de estas enfermedades. El Aula Multisensorial de la Fundación tiene una metodología propia, aunque se inscribe dentro del concepto snoezelen, que se basa en el trabajo en una sala adaptada con material adecuado para proporcionar experiencias sensoriales diversas.
El Espacio Multisensorial de la Fundación es un servicio en el que trabajan una fisioterapeuta y una psicóloga, y está dirigido tanto a los enfermos como a sus cuidadores o cuidadoras. La terapia tiene una duración de ocho sesiones y se realizan varias entrevistas, tanto para iniciar el tratamiento como para hacer el seguimiento. Los primeros resultados de este método son muy prometedores, ya que se ha detectado una mejora importante de los indicadores fisiológicos de los pacientes, como una reducción de las pulsaciones, y también de los síntomas de la depresión y la ansiedad que a menudo van asociadas a estos males. La relajación de los pacientes tiene también efectos positivos sobre el estado de burnout (agotamiento físico, mental y emocional) que sufren muchas de las personas que cuidan de los afectados por estas enfermedades. La terapia es coadyuvante, no sustituye en ningún caso los tratamientos médicos que siguen los pacientes.
En la comunicación que se ha dirigido a los asistentes a las Jornadas, las dos técnicas de la Fundación Sant Antoni Abat han explicado estos resultados y también la singularidad del Espacio Multisensorial de Vilanova. El espacio dispone de una cama de agua, torre de iluminación LED con burbujas, equipo de música y otros elementos, como una tableta o juegos cognitivos. El trabajo se inicia partiendo de la historia de vida del paciente, que sirve para introducir en las sesiones las habilidades, las aficiones, el origen, el entorno laboral, las relaciones familiares, con el objetivo de que los enfermos reaccionen, se abran y, en la medida del estado de cada uno, se produzca una evocación del recuerdo y un trabajo cognitivo y de sensibilidad.
Las sesiones tienen una duración de 45 minutos y se llevan a cabo semanalmente. La selección de los pacientes se realiza a través de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer del Garraf y de la delegación en Vilanova i la Geltrú de la Asociación Catalana para el Parkinson. En la actualidad se está estudiando la ampliación de este servicio a personas afectadas por fibromialgia y trastorno del espectro autista.