Juan Luis Ruiz: "Nuevo curso político: nuestra prioridad sigue siendo VNG"

13 de mayo de 2020 a las 14:14h

Con el inicio de septiembre, al volver de vacaciones retomamos el curso político, aunque no lo dejamos cerrado en algún momento.

La situación política general, tras la llegada del PSOE a la Moncloa, nos abre una oportunidad para abordar la crisis política en Cataluña. Es un hecho que Pedro Sánchez y su gobierno han mostrado un talante abierto a dialogar con el objetivo de recuperar la vía y acción de la política, abandonada durante todos estos años por el PP. Un PP que ahora compite con Ciudadanos en una carrera por ver quién lidera la derecha, con un discurso que busca aún más confrontación y agitación sin aportar ninguna propuesta.

La puesta en marcha de la comisión bilateral Estado-Generalitat que hacía 8 años que no se reunía es un buen inicio para desbloquear la relación entre las dos instituciones. Pero hay que ser realista, no se podrá resolver este conflicto en pocos meses. Habrá que generar un camino de entendimiento donde todo el mundo mostrará si realmente quiere buscar soluciones y actuar responsablemente o bien quiere continuar por vías radicalizadas de agitación unos o de unilateralidad otros y más grave, si aún quieren seguir haciendo un farol como si fuera un juego.

También es necesario un cambio de postura del gobierno de la Generalitat, es necesario que el Parlamento deje de estar cerrado y empiece a trabajar, y que lo haga para todos los catalanes y catalanas en aquello que es urgente y necesario abordar desde las políticas sociales, la educación, la salud y tantas acciones e iniciativas que se encuentran paralizadas. Cataluña no es ninguna república ni es independiente, pero gestiona cuestiones suficientemente importantes que influyen en la vida social y económica del país y para hacerlo hace falta diálogo, consenso y responsabilidad, alejarse de las unilateralidades y de las respuestas fáciles a problemas que no lo son. El gobierno de Pedro Sánchez ha sido capaz de encontrar alianzas, recuperando la institución parlamentaria como espacio para el debate, cediendo y negociando en aquello que el pacto PP-Ciudadanos había bloqueado. Mostrando que con política, diálogo y consenso sí es posible otra forma de gobernar.

Y en Vilanova i la Geltrú se abre también un período que finalizará con las próximas elecciones municipales del año que viene. Aunque aún quedan meses, los partidos que forman el gobierno municipal, la antigua CiU-PDECAT y ERC, inauguraron descaradamente la carrera electoral, dejando de lado literalmente la ciudad. Vilanova i la Geltrú tiene un gobierno desunido que no comparte los mismos objetivos más allá del que los une a nivel nacional. Un gobierno que aprende rápido de los otros, el enfrentamiento de los exconvergentes con ERC y cautivos de la CUP en la Generalitat es la foto fiel de lo que tenemos en la ciudad: ningún programa de gobierno que compartan mínimamente, una ciudad paralizada hasta las próximas elecciones convirtiendo el Ayuntamiento en una gestoría que no gestiona ni el día a día. Vilanova i la Geltrú no les preocupa, simplemente ha pasado a ser una herramienta en su estrategia electoral, mientras vemos con preocupación que cada vez hay más dejadez en el mantenimiento, la limpieza y los servicios públicos básicos que repercute sobre todo si quiere ser una capital comercial y un destino turístico.

CiU y ERC actúan tarde y mal, dejando perder oportunidades como la capitalidad de la veguería del Penedès, donde han tardado en reaccionar semanas, o en el barrio de Mar, con el ejemplo de la calle Llibertat, donde se implementa un área de peatones que tenía el consenso de todo el mundo pero sin explicar nada al vecindario ni a los comerciantes, teniéndola que retirar al cabo de una semana. Eso sí, veremos mucha improvisación y anuncios de proyectos trabajados otros gobiernos para apuntarse alguna medalla.

Asistimos pues a unos meses que deben ser claves para recuperar también la política en mayúsculas en la ciudad, para trabajar con toda la dedicación y esfuerzo que se merece. Desde el PSC lo hacemos para que dentro de unos meses también sea posible un cambio de las prioridades en el Ayuntamiento, que la institución esté para resolver problemas y no para generarlos y trabaje realmente para todos y todas los vilanovenses y las vilanovenses y el futuro de Vilanova i la Geltrú.

Juan Luis Ruiz

PSC Vilanova i la Geltrú