El próximo mes de noviembre el atleta viajará hasta la provincia de Alicante donde llevará a cabo la experiencia de ultra distancia a lo largo de 24 horas más una sorpresa final.
Carles Aguilar ya ha llevado a cabo otros retos deportivos importantes en años anteriores como por ejemplo en la isla de Formentera donde estuvo corriendo sin parar durante 48 horas con una distancia alcanzada de más de 212 km; en la provincia de Soria con TemplarsXtremTrail, corriendo 190 km en 3 etapas y 3.500 m de desnivel por las mucopolisacaridosis; atravesando el desierto de los Monegros (Huesca) durante 120 km por la salud mental o recorriendo toda la costa catalana desde Port Bou a Alcanar durante 6 días y más de 400 km por la parálisis cerebral, entre otros.
Esta vez la acción está canalizada a través de la Fundación Alzheimer Catalunya, con el objetivo de sensibilizar a la población sobre esta cruel enfermedad y recoger donativos para la investigación para encontrar una solución a la enfermedad y para cuidar de los enfermos.
Desde la Fundación Alzheimer Catalunya trabajan para que la voluntad de las personas sea más fuerte que el miedo, que los prejuicios o que los síntomas. Convivir con la enfermedad es duro, pero los enfermos deben seguir viviendo la vida y seguir formando parte de la sociedad. El equipo de la Fundación Alzheimer Catalunya trabaja incansablemente desde 1988 para que cada paciente diagnosticado siga decidiendo durante todo el proceso de su enfermedad por él mismo mientras pueda y más adelante al menos siendo consciente de su perspectiva. La actividad de Alzheimer Catalunya está fuertemente ligada a iniciativas por el bienestar social, a proyectos europeos sobre salud y demencia y, evidentemente, a instituciones vinculadas a Catalunya.
Un recorrido extremo con una historia repleta de leyendas
Todo comienza en el siglo XIII, donde después de la Conquista de Jaume I, los moriscos que poblaban la zona de levante y las cercanías al lugar que indicado fueron desposeídos de sus tierras, discriminados e incluso esclavizados. Por lo tanto, aquellos que durante siglos habían sido amos y señores de tierras, o sus descendientes, en alguna de las tres Taifas de Balansiya, no tuvieron más remedio que refugiarse en las montañas de los valles de Guadalest, Laguar, Alcalá, Ebo y la Gallinera para poder, así, vivir más tranquilos y crear su propio refugio apartados del cristianismo. El hecho de que el desplazamiento fuera hacia el sur y no hacia el norte no era otro que el empuje de la Corona de Aragón (desde el norte) y, quizás, de las cercanías o proximidades al anhelado al-Andalus, que comenzaba ya que su decaimiento por las consiguientes conquistas cristianas.
Y es aquí cuando entra en juego la montaña alicantina, que fue sin duda una isla rodeada de un mar de cristianismo. Un paraje bello pero duro a la vez, rocoso pero lleno de vegetación, que sin duda no deja de sorprender a quien lo visita. Los señores feudales de entonces anhelaban poseerla, pero aquella montaña era uno de los últimos reductos de aquellos orgullosos moriscos. Fueron años duros, de pactos breves, de emboscadas y escaramuzas entre dos bandos: por un lado las tropas de Jaume I; por otro, los partidarios del visir Al-Azraq, más conocido como el "Azul".
La ruta de los 6.873 escalones construidos siglos atrás en el "Barranco del infierno" Al norte de la provincia de Alicante, en el evocador Valle de Laguar, encontramos el Barranco del Infierno, un espectacular y estrecho cañón, esculpido por las aguas del Río Girona a lo largo de miles de años.
Este tortuoso desfiladero, es el protagonista de una de las rutas de senderismo más singulares y concurridas de la geografía alicantina con una fama muy merecida. De alto interés geológico y arqueológico. En el barranco se pueden encontrar numerosos abrigos con diferentes estilos de pinturas rupestres (arte levantino, arte esquemático y arte macroesquemático)
Se trata de una ruta circular de exigencia física considerable que, a través de sorprendentes paisajes, ofrece un patrimonio cultural excelente, enclavado en un escenario natural de gran valor ecológico. Un legado que debe ser conservado.
Posiblemente sea a causa de sus más de 6.800 escalones de piedra, que se conoce a esta ruta con el sobrenombre de La Catedral del Senderismo.La prueba deportiva consistirá pues en realizar un recorrido circular por el Valle de Laguar durante 24 horas para finalizar en el "Barranco del Infierno" y sus 6.873 escalones.
El atleta, fiel a su filosofía en retos anteriores, realizará esta experiencia en solitario y utilizando únicamente sus propios recursos de subsistencia a lo largo del recorrido. Todas las acciones y la información relacionada con este reto llamado "HellCanyonRun (Extended Play) está centralizado en el microsite que la Fundación Alzheimer Catalunya ha publicado en su web a través del cual se pueden realizar donaciones para ayudar a la investigación sobre el Alzheimer y colaborar en la mejora de la calidad de vida de las personas afectadas por esta enfermedad incurable.
El microsite del reto deportivo es este: alzheimercatalunya.org/km Además, el propio atleta irá publicando en las redes sociales propias las noticias y novedades que se vayan produciendo con el hastag:#kmcontraelolvido