Contra el PSC, Vilanova i la Geltrú se vivía mejor

13 de mayo de 2020 a las 14:12h

Esta es la frase que deben pensar los miembros del tripartito vilanovés después de los primeros 100 días del nuevo gobierno de Vilanova i la Geltrú.

Unos, la CUP, que venían a dar un vuelco a la ciudad, y los otros, ERC, que estuvieron la anterior legislatura desde una oposición poco responsable. Y es que los puntos que se han aprobado en el Pleno muestran que todo aquello que nos dijeron en campaña, y de los que algunos hicieron bandera durante 12 años, han pasado a un cajón. Una actitud totalmente vergonzosa, sobre todo para aquellos que hace solo unos meses pedían moratorias y se autoimponían líneas rojas.

El contrato de alumbrado público, que fue tan criticado por ERC como por la CUP cuando estaban en la oposición y al que no dieron apoyo, ahora parece que tendrá más bien beneficios para la ciudad, y que un contrato de estas características no se puede llevar con medios propios, cuestión que se ponía en duda con una intervención que ahora ha quedado desmentida por la misma persona que la hacía entonces.

O la cuestión de los cargos de confianza, sobre los que durante años hemos escuchado discursos absolutamente demagógicos, pues bien, el gobierno contará este mandato con 4 cargos de confianza, el último aprobado con los votos favorables de la CUP, ya que es su propio cargo, justamente dos meses después de votar en contra. Desde el PSC lamentamos esta actitud nada coherente con lo que siempre habían dicho: que el gobierno ya tenía todo el cuerpo de trabajadores y trabajadoras, y por tanto, debía renunciar a ello.

Y finalmente, el proyecto del Parque Comercial, un proyecto que ERC lamentó el poco debate y sobre el que la CUP abanderó una campaña, incluso presentado alegaciones y criticando duramente la aprobación que hizo ERC y PdeCat, que las desestimaron.

El Pleno de octubre aprobó definitivamente los trámites municipales para que ahora la Generalitat lo apruebe. Un punto donde el gobierno decidió no hacer ningún debate ni dar respuesta a las preguntas que hicimos desde el PSC pidiendo información sobre el estado de las actuaciones que ERC había puesto como condición para aprobarlo y de las que nadie sabe nada: hacer un plan comercial, nuevos aparcamientos en la rambla Sant Jordi, mejorar la avenida Vilafranca, con el proyecto que fue presentado por el PSC al vecindario... Continúan manteniendo un perfil bajo como ya hicieron en campaña, donde ya dejaron claro que de "planeamiento urbanístico no hablaremos". De esta manera evitan un debate incómodo para el gobierno con posturas totalmente contradictorias (de momento es la CUP quien ha aparcado sus líneas rojas) y de paso, avanzan un poco más en la poca participación en proyectos y planes importantes para la ciudad los próximos años.

Una muestra más de esta incoherencia es la votación de la moción sobre la internalización de servicios municipales, ahora la CUP considera que decidir si se pueden o no municipalizar dependerá de criterios también técnicos y no únicamente de voluntades políticas.

Vemos un gobierno que pasados sus primeros 100 días, muestra una clara ausencia de un proyecto compartido para la ciudad, que pueda reunir a una mayoría. Las contradicciones con temas clave para la ciudad los próximos años, pueden llevar a una mala gestión de los mismos. Un gobierno sin ideas que lo único que les une es haberse puesto de acuerdo para evitar que el PSC gobernara. Seguramente estar en la oposición con la actitud del no a todo, que tuvieron estos partidos sería mucho más cómodo y fácil. Desde el PSC no lo haremos y mantendremos la oposición firme pero constructiva en todo aquello que consideremos positivo para Vilanova i la Geltrú.

Grupo Municipal Socialista

Vilanova i la Geltrú