Durante un control de alcoholemia, la Policía Local de Sant Pere de Ribes detectó el pasado domingo de madrugada en la Rambla del Garraf a dos personas que conducían sin el correspondiente permiso de conducir y una de ellas, además, bajo los efectos del alcohol.
Los agentes observaron cómo un vehículo realizó una maniobra evasiva al ver las dotaciones policiales, y estacionó de manera precipitada en un lateral de la vía. Una de las patrullas se acercó al vehículo y pudo comprobar que el conductor no había obtenido nunca ningún permiso o licencia de conducir, motivo por el cual se instruyeron diligencias por un delito contra la seguridad vial.
En el mismo control, una conductora fue denunciada administrativamente por conducir un turismo sin permiso habilitante, bajo los efectos del alcohol, y por facilitar datos falsos en su identificación.
Dos días antes, también la Policía Local y los Mossos interceptaron a un vecino de Canyelles que conducía de manera temeraria bajo los efectos del alcohol y que antes había protagonizado unos altercados en aquel municipio. El conductor dio en la primera prueba un resultado de alcoholemia que cuadruplicaba el permitido. Se le instruyeron diligencias penales por este motivo.
