SÍNIUM propone distribuir las viviendas de las parcelas 49, 50 y 51 de la zona del PPU1 (Plan Parcial Urbanístico 1) ubicadas entre las calles Lola Anglada, Jacint Picas i Cardó y Josep Mª Massip en una sola isla practicable desde el exterior.
Esto supone un cambio significativo de la idea inicial, que preveía la construcción de tres islas cerradas en sí mismas. De este modo, la nueva ordenación da un uso público al interior de los edificios, que se convierte en una plaza de acceso libre, mientras que hasta ahora el plan contemplaba la creación de tres patios interiores.
El jurado ha valorado, sin embargo, que la propuesta maximiza la edificabilidad permitida por el Plan Parcial, y la densidad (la capacidad de construir un número determinado de viviendas) manteniendo los criterios estéticos y medioambientales. Finalmente, ha tenido en cuenta también la mirada de género para que la reestructuración de los edificios no supusiera la creación de espacios inseguros, oscuros o cerrados.
Un concurso para mejorar la forma y la redistribución del espacio público El pasado mes de septiembre, el Ayuntamiento convocó un concurso de ideas público para rediseñar los volúmenes y la distribución de las parcelas 49, 50 y 51 del PPU1, destinadas a vivienda protegida.
El objetivo era conseguir propuestas que mejoraran el uso público de los espacios interiores, a la vez que los elementos estéticos y ambientales, agotando al máximo la edificabilidad y densidad de las islas.
El concurso valoraba, sin embargo, la capacidad de generar una transformación urbana del entorno y otorgar identidad a la zona, la capacidad comercial, la conectividad con los vecinos y la perspectiva de género, entre otros. "Es decir, la capacidad de la propuesta de crear una zona con vida y actividad, de fácil acceso y donde todas las personas se pudieran sentir a gusto" según ha explicado la concejala de Vivienda, Júlia Vigó.
Finalmente, un jurado formado por la concejala de vivienda, Júlia Vigó; la directora del área de Promoción y Territorio del Ayuntamiento; el jefe del departamento de Territorio, Sostenibilidad y Vivienda; el arquitecto municipal; el jefe del servicio de Planificación y Gestión Urbanística; así como el subdirector general de Urbanismo de la Generalitat, eligió, este mes de octubre, la propuesta ganadora, llamada SÍNIUM.
Pasos a partir de ahora La propuesta resultante del concurso de ideas es el punto de partida sobre el que se empezará a trabajar a partir de ahora. En las próximas semanas, los técnicos municipales se reunirán con los ganadores del concurso para seguir trabajando en la propuesta y ajustarla al máximo a las necesidades de Sitges. De este trabajo saldrá la propuesta definitiva de formas, volúmenes y distribución de los edificios, que deberá obtener la aprobación del Pleno y pasar por todos los trámites administrativos necesarios. Será a partir de entonces que se empezará a trabajar en el diseño de los interiores: el número, la tipología de viviendas y qué distribución tendrán. Una fase que precederá al inicio de las obras.