El Ayuntamiento de Sitges pone en marcha este miércoles un nuevo dispositivo de alojamiento temporal para atender a las personas sin hogar en la ciudad, uno de los colectivos más vulnerables y expuestos a la infección. Este colectivo se alojará en un establecimiento hotelero céntrico del municipio. Mañana entrarán las primeras 7 personas y tendrán cabida un máximo de 10 mientras dure el estado de alarma y la crisis del coronavirus. Todas las personas que acepten esta medida del Ayuntamiento, deberán firmar el compromiso de seguir con las pautas de confinamiento.
La Concejala de Derechos Sociales, Ciudadanía e Igualdad, y Vivienda, Júlia Vigo, destaca que "este nuevo servicio busca poder dar la posibilidad de confinarse a las personas que no tienen hogar con las mejores condiciones posibles y en un alojamiento donde existe la posibilidad de hacer aislamientos si fuera necesario". La concejala explica también que "hemos trabajado también para que todas estas personas tengan garantizadas las necesidades más básicas".
Las habitaciones de este hotel garantizan las medidas de higiene y la distancia social recomendada por las autoridades sanitarias.
El Ayuntamiento de Sitges se hará cargo del gasto por habitación, la alimentación, la limpieza y también asumirá un gasto por la contratación de seguridad privada y la vigilancia de los accesos. También se ha previsto que el educador, que trabaja habitualmente para el proyecto de personas sin hogar, esté en el establecimiento para hacer un seguimiento del colectivo, y, a su vez, se contratará también a un profesional del mundo social (educador o integrador) adicional para cubrir a esta persona durante sus horas de descanso.
El Hospital elaborará la comida y la distribuirá la Mesa del Tercer Sector, y la Cruz Roja les entregará un kit de higiene personal y kits de alimentación básica para cubrir los desayunos. También se ha contactado con el CAP por si fuera necesario atender a estas personas vulnerables, algunas de las cuales tienen o pueden tener enfermedades respiratorias crónicas.
Desde el inicio de la crisis del coronavirus, la concejalía de Derechos Sociales, Igualdad y Ciudadanía ha hecho un seguimiento diario de todas las personas que viven en la calle. Los servicios para las personas sin hogar se han mantenido activos, entre los que se encuentra el servicio de duchas en el pabellón, donde se les tomaba la temperatura, y el educador en la calle ha realizado tareas de salud pública ofreciendo consejos de higiene personal.