La Casa de la Vila de San Pedro de Ribas se inaugura oficialmente, cuando hace casi seis años que tuvo que cerrar debido a la aparición de una plaga de termitas. Desde entonces, los diferentes departamentos han trabajado trasladados en otro edificio municipal y ahora una parte podrán regresar al ayuntamiento. Las obras han costado 1,6 millones de euros (MEUR) y se han dilatado más años de lo previsto debido a dos cambios de gobierno municipal y a la quiebra de la empresa que inició el proyecto. Las obras han servido para reforzar la estructura, reformar el edificio manteniendo los elementos modernistas históricos, instalar un ascensor y también se ha construido una sala polivalente anexa.
A partir del 1 de marzo, la Oficina de Atención Ciudadana de Ribas volverá a ubicarse en la Casa de la Vila, donde también se trasladarán de forma definitiva los departamentos de Alcaldía y Secretaría. Mientras tanto, continuarán en el edificio municipal de Can Puig tanto la Policía Local como otros servicios municipales, a la espera de que termine la segunda fase de las obras. Para este 2018, la previsión es destinar 740.000 euros a terminar la reforma de la segunda planta de la Casa de la Vila y adecuar el edificio del lado, donde estaba el Juzgado de Paz. En conjunto, toda la reforma habrá costado casi 2,4 MEUR, de los cuales 1,6 los ha financiado la Diputación de Barcelona. Quedarán para una tercera y última fase las obras de urbanización de la Plaza de la Vila.
