Las obras de renovación del núcleo principal de la red de abastecimiento de agua potable de Ribas en el sector de Can Puig encaran la segunda y última fase del proyecto, que afectará al paseo de Circunvalación. Como en la primera intervención, se instalarán nuevas tuberías, válvulas de seccionamiento, conexiones y desagües. En este tramo, además, se aprovechará para arreglar de nuevo la acera norte del paseo, entre las calles de Jaume Balmes y Joan Maragall. Las raíces de los árboles han levantado el pavimento, dificultando la accesibilidad de la acera, y también han afectado a las instalaciones de suministro de agua, llegando a reventar tuberías y provocando filtraciones y fugas.
Para evitar que estos problemas se repitan, se replantarán nuevos árboles que sean respetuosos con las aceras y los diferentes conductos de agua y gas que atraviesan la calle. La obra cuenta con un presupuesto de 215.000€ y tiene una duración prevista de tres meses, que se dividirán en dos períodos para evitar coincidir con las fiestas de Navidad.
El contacto con los vecinos y vecinas ha sido clave a lo largo de la preparación de las obras. La alcaldesa Abigail Garrido, que hoy ha explicado cómo se llevará a cabo toda la intervención, destaca que al Ayuntamiento le gusta trabajar "de manera participativa y de proximidad con los ciudadanos" y que en este sentido en las reuniones con los vecinos y vecinas "les explicamos cómo iría todo y también escuchamos propuestas y sugerencias, que encontramos muy acertadas para incluir en el proyecto". El vecindario de la calle, además, contará con un contacto técnico a quien podrán explicar las diferentes problemáticas particulares y así poder abordar una mejora en profundidad de la zona.
El proyecto de mejora de la red de agua potable forma parte del Plan de Reactivación Municipal 2017-2018, que se está ejecutando para renovar las infraestructuras básicas de la trama urbana y, al mismo tiempo, servir como revulsivo para el fomento del empleo en el municipio.
La primera fase, ya terminada, afectó a las calles Galceran, Arquitecto Martorell, Joan Miró y diferentes tramos de las calles Mayor y Doctor Marañón. Era la zona que presentaba más problemas y fugas, un 55% del total del municipio, que ya se han podido resolver y, al mismo tiempo, actuar para evitar que se repitan. Además, se ha aprovechado la apertura de la zanja para reasfaltar las calles Joan Miró, Martorell y Galceran, que presentaban un pavimento muy deteriorado por el paso del tiempo.
En Les Roquetes también se han realizado actuaciones de mejora de la red de agua y alcantarillado. Se ha renovado la canalización de la calle Murillo (uno de los puntos negros en fugas) la plaza de Hernán Cortés, la calle de Cid Campeador (acera sur) y en breve se iniciará, también en el mes de diciembre, las obras de la nueva acera norte de esta calle aprovechando la sustitución de la red de agua potable.
