El servicio de transporte público de Sant Pere de Ribes solo alcanza el 72,9% de cobertura del territorio. Más del 27% de la población no tiene acceso al servicio público de transporte. Las 16 urbanizaciones del municipio (Vallpineda, El Mas d'en Serra, Els Colls, Rocamar, Can Lloses-Can Marcer, Mas Alba, Can Pere de la Plana, Els Cards, Can Macià, Puigmoltó, Els Vinyals, Els Torres, El Mas Perers, Vilanoveta, Els Garrofers y la Torre del Veguer) no tienen ninguna facilidad para la movilidad urbana. Las dificultades de los vecinos de estas urbanizaciones no están resueltas, a pesar de las continuas quejas al Ayuntamiento. En cuanto a los principales núcleos del municipio, Ribes ocupa una posición central en cuanto a la movilidad municipal, pero en Roquetes faltan servicios y conexiones rápidas en horas punta.
La falta de una cobertura óptima de transporte público genera un uso elevado del transporte privado con los consecuentes riesgos para la salud de la población. En este sentido, en cuanto a la seguridad vial, en los últimos 3 años (2015-17) el número de accidentes con víctimas se ha incrementado más de un 50% (desde 104 hasta 154) desde el período 2012-14. Además, el municipio no dispone de un mapa de capacidad acústica aprobado ni un mapa de ruido del municipio que permita regular la movilidad para minimizar el impacto nocivo sobre los vecinos. Sant Pere de Ribes no dispone de ninguna estación para medir la calidad del aire, a pesar de estar incluida en la Zona ZQ3 Penedès-Garraf; hecho que permitiría un análisis cuidadoso de la situación referida a las emisiones contaminantes de los vehículos a motor.
Por todo ello, Josep Ma Valle, candidato a la alcaldía por Junts per Catalunya-Sant Pere de Ribes, reclama "la creación de dos líneas de bus urbano que den respuesta a las necesidades de movilidad de los vecinos de las 16 urbanizaciones del municipio, que representan el 20% de la población." Con el objetivo de mejorar la calidad del aire y la reducción de ruidos, destaca la necesidad de que "estas nuevas líneas urbanas así como todos los vehículos municipales sean ya híbridos o totalmente eléctricos". Con todo, "se pretende reducir la siniestralidad vial y los niveles de contaminantes del aire y los ruidos que acaban impactando directamente en la calidad de vida de los vecinos".